Tzitzio, Mich.- Dos hermanos fueron ultimados a balazos en una boda celebrada en Tafetán; los agresores se dieron a la fuga y el asunto es indagado por la Unidad Especializada en la Escena del Crimen (UEEC), dependiente de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE). Los cadáveres fueron trasladados al Servicio Médico Forense, donde se les practicaría la necropsia. Se supo en el trabajo noticioso que precisamente se realizaba una fiesta después de un casamiento. En el lugar había diversas personas, entre familiares e invitados de los novios. Sin embargo, de pronto dos consanguíneos fueron blanco de un atentado a tiros y a raíz del mismo perdieron la existencia. Los hechores se retiraron de inmediato tras perpetrar el crimen. Hubo gritos al saber de los muertos y los parientes de éstos llegaron hasta donde estaban tirados. Hubo también llanto y varias personas que estaban en la celebración mejor se fueron a sus casas para "evitar problemas", decían. Minutos después llegaron al sitio los representantes de la ley, los oficiales de la Policía de Tzitzio, quienes resguardaron el área y la acordonaron en apego a la cadena de custodia. Los uniformados pidieron el apoyo de la PGJE y posteriormente se apersonaron los expertos de la UEEC. Unos peritos hicieron la recolección puntual de pistas y hallaron varios casquillos percutidos calibre .40 milímetros. En tanto, en la labor de investigación periodística se pudo conocer que los ahora occisos fueron identificados por sus seres queridos como Paulo y Pedro "C", de 35 y 33 años de edad, respectivamente. El móvil del doble homicidio ya es indagado por la UEEC.
La Voz de Michoacán
