Tzintzuntzan, Michoacán.- El cadáver de un hombre ultimado a tiros fue hallado por unos lugareños en un predio que está junto a una barranca, la cual divide los sitios conocidos como La Lobera y Las Cuevas, en esta demarcación. La Unidad Especializa en la Escena del Crimen (UEEC), adscrita a la Procuración General de Justicia (PGJ), lleva las riendas de las investigaciones. Todo fue la mañana de este miércoles. Los guardianes del orden acudieron a donde estaba el fallecido, el cual no tenía ya la piel de la cabeza y de la nuca, pues ésta había sido devorada por unos canes que andaban por el lugar. La víctima está en calidad de desconocida. Los peritos de la UEEC emprendieron la recolección de indicios y así localizaron dos balas percutidas calibre .38 Súper, las cuales embalaron para darle seguimiento a las pesquisas. A juzgar por su cuerpo, el difunto es una persona de entre 35 y 40 años de edad, como seña particular tenía un tatuaje de San Judas Tadeo en su humanidad. El área fue acordonada en apego a la cadena de custodia y los oficiales de Seguridad Pública se encargaron de dar vigilancia perimetral. Todo fue en los terrenos de la comunidad de Ihuatzio. Los restos del ciudadano fueron subidos a una ambulancia de uso forense para trasladarlos a la morgue de la Fiscalía Regional de Justicia de Morelia, a donde se espera que acudan sus deudos para reclamarlos.