Ciudad de México.- Un grupo de científicos de las más importantes agencias espaciales en el mundo se reunieron en el Museo de las Ciencias Universum para hablar sobre los avances hasta ahora en la búsqueda de vida en el planeta Marte. Una de las mayores incógnitas del ser humano es saber si son los únicos en el universo, a lo que todos los científicos concuerdan en que Marte es el lugar más idóneo para buscar entornos habitables, pues su historia geológica es similar a la Tierra. Mediante la misión Curiosity, la Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio (NASA, por sus siglas en inglés), detectó características de entornos habitables en la zona llamada Bahía Yellowknife, mencionaron los científicos. Esta zona cuenta con depósitos similares a un lago, lo que demuestra que hubo evidencia de vida, explicó David Blake de la NASA. Parte de la mineralogía indica que la interacción de los sedimentos de la región con un líquido semejante al agua demuestra que hay un sistema antiguo de ríos que forma lechos húmedos. Además, los ingredientes químicos presentes como carbono, hidrógeno, oxígeno y nitrógeno aluden a la probabilidad de esta teoría, por lo que cada exploración pretende caracterizar los entornos de cada una de estas distintas unidades para saber si hay vida en Marte. Entre tanto, el proyecto ExoMars, consta de dos misiones, de las cuales la primera se lanzó este año y llegará al planeta rojo el 19 de octubre, indicó el miembro de la Agencia Espacial Europea (ESA, por sus siglas en inglés), Jorge L. Vago. “Estamos muy contentos y tenemos grandes esperanzas en este pequeño programa de dos misiones, nos dará una nueva ventana a los procesos atmosféricos de Marte y podremos saber el origen del metano que se encuentra allá”, indicó. La primera fase cuenta con tres propósitos, el primero de carácter científico que con base en una misión de 2003 se descubrió la presencia de metano, por lo que se busca realizar un estudio profundo en la atmósfera marciana. El científico mencionó que buscan saber de dónde proviene el metano, además de otras moléculas, pues dicha asociación entre distintas moléculas podría explicar si el metano tiene un origen biológico o geológico. El segundo paso pretende enseñar a europeos y rusos cómo aterrizar en Marte, para desarrollar nuevas tecnologías y usarse durante la segunda misión. Por último se proyecta crear un sistema de comunicación satelital propio que permita el intercambio de información entre los robots enviados y la Tierra. La segunda misión se espera lanzarse en 2020 para buscar rastros de microbios de cuatro mil millones de años de antigüedad o más a través de excavaciones profundas de dos metros, destacó Vago. El astrobiólogo integrante de la misión Curiosity e investigador del Instituto de Ciencias Nucleares de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Rafael Navarro González, indicó que se busca la vida bacteriana en Marte, pues ésta se puede dar en condiciones más extremas. “En realidad, lo que estamos haciendo nosotros es buscar que puede haber un segundo origen de la vida y el lugar más cercano es Marte”, dijo el científico en una entrevista con la Agencia Informativa del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt). “Si encontramos que Marte tiene vida emparentada con la nuestra, nunca sabríamos dónde surgió la vida, si en Marte o la Tierra”, agregó. De encontrar vida en Marte y ésta fuera diferente a la Tierra, se podrían cambiar las condiciones climáticas para adecuarlas e intentar producir bacterias. "Por ejemplo, si existió vida en Marte pero no existe en la actualidad, podríamos llevar vida de la Tierra a Marte y colonizar el planeta”, expuso. Explicó que de este modo los microorganismos marcianos que viven en el subsuelo pudieran migrar a la superficie con agua líquida y con una atmósfera más densa. Por su parte, Vago mencionó que en la actualidad buscan realizar un laboratorio libre de bacterias para poder determinar con mayor precisión la existencia de vida en Marte. “Lo que estamos tratando de hacer ahora es montar un laboratorio de química analítica en condiciones superlimpias, porque para poder decir que a lo mejor encontramos rastros de vida en Marte”, dijo. “Tenemos que probar primero que no traemos nada con nosotros de la Tierra que pueda resultar como una señal positiva pero que en realidad no es cierto, eso nos va a llevar bastante tiempo”, abundó.