Ciudad de México.- La relación de tres mujeres: madre, hija y colega o discípula; en una noche que se convierte en un campo de batalla, es el hilo conductor de la propuesta teatral “Señora Klein”, que anoche inició temporada en el Foro La Gruta, del Centro Cultural Helénico, en esta ciudad. Con la dramaturgia del escritor británico Nicholas Wright, se trata de un proyecto traducido y dirigido por Emoé de la Parra, quien presenta un montaje basado en la biografía de Melanie Klein y en su polémica versión del psicoanálisis aplicado a niños. Luego de haber sido escrito en 1988 y montado por vez primera en México hace 25 años por Ludwik Margules, De la Parra ofrece un estudio al mismo tiempo conmovedor y angustioso de las relaciones entre madre e hija. La anécdota se desarrolla en 1934, en Londres, Inglaterra, en la casa Melanie Klein, ella está a punto de partir a Budapest al funeral de su hijo; en ese momento aparece Paula, una joven colega, y Melitta, hija de Klein. Se trata del encuentro de tres notables psicoanalistas que se relacionan en una lucha sin cuartel en torno a una aterradora cuestión, ¿fue la señora Klein una madre devota o un monstruo que utilizó sus habilidades psicoanalíticas hasta el punto de arrastrar a su hijo al suicidio?. Por espacio de una hora se ofrece un texto dramático inteligente, corrosivamente divertido y al mismo tiempo aterrador, en el que se muestran la indefensión y la violencia de tres mujeres que enmascaran sus almas tras sofisticadas técnicas terapéuticas. En lo que parece ser el consultorio de Melanie Klein, adornado por sillas y dos burós, se desarrolla esta historia en la que participan las actrices Emoé de la Parra, en el rol central; Paola Izquierdo y Alejandra Maldonado, quien alterna con Georgina Rábago. Con palabras y gestos, las protagonistas transmiten sentimientos desgarradores y contradictorios, dejando sin aliento a los espectadores. Emoé de la Parra presenta un montaje que se encamina a profundizar, incluso a exacerbar, los conflictos entre los personajes, poniendo un especial énfasis en la palabra como máscara, como arma, como expresión de los deseos conscientes e inconscientes. “Señora Klein” pretende llevar a los espectadores por los más profundos y soterrados rincones humanos, donde la violencia y la desesperanza coexisten con el amor y la compasión. En una idea escénica que logra líneas de comunicación íntimas con el público, tanto por el valor intrínseco de la obra dramática misma, como por los conflictos y las relaciones que se plantean. La obra estará en cartelera todos los domingos hasta el próximo 28 de agosto en el recinto situado en la zona de San Ángel.
La Voz de Michoacán
