Tuxtla Gutiérrez, Chiapas.- Maestros disidentes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) en Chiapas se sumaron hoy a los bloqueos carreteros para exigir la liberación de los dirigentes de la Sección 22 de Oaxaca, Rubén Núñez, y Francisco Villalobos. Los docentes se apostaron en tramos carreteros de la capital chiapaneca y en la carretera costera, que enlaza a la frontera con Guatemala. Los maestros afiliados en las Secciones 7 y 40 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) se ubican en la entrada poniente de esta ciudad, en las inmediaciones del tramo carretero la Pochota, donde policías federales y estatales despliegan un operativo para evitar el cierre de la vía. Otros grupos de disidentes se manifiestan en la carretera Plan de Ayala-Tuxtla Gutiérrez-San Fernando. Hasta ahora se han reportado protestas en la carretera costera, a la altura del municipio de Tuzantán, Por su parte, el servicio de transporte urbano Conejobús suspendió sus corridas en Tuxtla Gutiérrez por la falta de seguridad para sus unidades y pasajeros. Los autobuses que recorren la ciudad de oriente a poniente, en varias ocasiones han sido retenidos y quemados por manifestantes. El transporte ha sido suspendido por ahora y se reanudará hasta que existan condiciones para transitar la ruta. El magisterio chiapaneco cumplirá pasado mañana un mes de paro de labores y de sostener un plantón en el zócalo y calles céntricas, en demanda de una mesa de diálogo con el gobierno federal. La dirigencia magisterial aseguró que, no obstante el arresto de los líderes de la Sección 22, las protestas y movilizaciones del magisterio chiapaneco no se detendrán. La lucha contra la reforma educativa seguirá, pese al “acoso y las intimidaciones” que prevalecen. “Asumimos las consecuencias y las reacciones del gobierno”, afirmó Pedro Gómez Bahamaca, integrante de la dirección política de la Sección 7 del SNTE.