Nueva York.- De cara a su último partido de la fase de grupos de la Copa América Centenario, y con la clasificación a cuartos de final ya asegurada, el técnico de Colombia José Pékerman apostó por una estrategia osada: alineó a 10 suplentes en el duelo ante Costa Rica. James Rodríguez, Juan Guillermo Cuadrado, Carlos Bacca y otros titulares comenzaron en la banca, cediendo sus puestos a jóvenes como Roger Martínez y Marlos Moreno, la apuesta de Pékerman para el futuro de la selección. Las críticas no se hicieron esperar, sobre todo después que Colombia perdió 3-2 y terminó segunda en el Grupo A. Todo apuntaba a que le aguardaría un cruce contra Brasil, el mismo rival que eliminó a James y compañía en los cuartos de final de la Copa del Mundo de 2014. Lo único que tenía que hacer la Verdeamarela era conseguir un empate ante Perú en su último partido de la primera etapa. Perú tenía otros planes. El equipo dirigido por Ricardo Gareca, tercero en la Copa América del año pasado en Chile, venció 1-0 a Brasil, ganó su sector y dejó fuera a uno de los favoritos del torneo. Ahora, Perú enfrenta el viernes a Colombia en los cuartos de final en el estadio MetLife de East Rutherford, Nueva Jersey, en un duelo que contará con hinchas de dos de las principales colonias hispanas en el área de Nueva York y Nueva Jersey. "Todos sabemos el potencial que tienen", advirtió el zaguero colombiano Jeison Murillo, otro de los titulares que descansó el sábado frente a los ticos