Roma.- La más grande muestra dedicada hasta ahora al misterioso artista callejero inglés conocido como Banksy fue inaugurada en el Palacio Cipolla de la capital italiana, donde permanecerá abierta hasta el próximo 4 de septiembre. La reseña podría parecer una contradicción respecto al espíritu contestatario y rebelde de Banksy, contrario a toda forma de mercantilización de un arte nacido para protestar y no para ser encerrado entre las paredes de una galería, pero según los organizadores ninguna de las obras expuestas fue arrancada de los muros callejeros. “El artista conocido como Banksy no está asociado, ni involucrado en esta exposición museal. Todas las obras presentes en la muestra provienen de coleccionistas privados internacionales y ninguna obra ha sido arrancada a las calles”, advirtió una nota del Palacio Cipolla. Titulada “Guerra, Capitalismo & Libertad”, como los temas a los que está dedicada, la muestra incluye pinturas originales, grabados, esculturas y objetos raros. Su curaduría corrió a cargo de Stefano Antonelli, Francesca Mezzano y Acoris Andipa. Emmanuele M. Emanuele, presidente de la Fondazione Terzo Pilastro, una de las organizadoras del evento, resaltó que se trata de la primera vez que tantas obras del máximo exponente internacional del arte callejero son expuestas en un museo. Dijo que los temas tratados (guerra, capitalismo y libertad) parecen ser las fuentes primarias de inspiración del arte de Banksy, caracterizado por una fuerte componente de denuncia social y por abordar los argumentos más actuales y urgentes que forman parte de nuestro presente. Hasta hace poco tiempo Banksy era el artista más anónimo del planeta, pero según una reciente investigación de la Universidad Queen Mary de Londres, su verdadera identidad sería la de Robin Gunningham, nacido en Bristol en 1974. El misterio mayor no es, sin embargo, su nombre, sino el hecho de que durante tanto tiempo haya mantenido en secreto su identidad, si se considera que ha irrumpido en revistas y museos, ha rodado videos, guiado a otros artistas a pintar un muro en Palestina y hasta organizado Dismaland, “un parque temático no apto para niños”. Su trabajo combina escritura con grafiti con el uso de estarcidos con plantilla (conocidos como stencils) y ha sido comparado con el del también artista callejero francés Bleck le Rat. Según Acoris Andipa, uno de lo curadores de la muestra, la misma fue organizada con la condición de que en el título no apareciera el nombre de Banksy, pues el artista es contrario a la dimensión comercial que ha adquirido la circulación de sus obras. En una entrevista con el diario Corriere della Sera aseguró que aceptó ser el curador porque la muestra tiene un carácter no comercial, ni de ganancia y debido a que ninguna de las obras fue arrancada de las calles. De la exhibición forman parte pinturas legendarias, como la del policía que muestra el dedo medio o el manifestante encapuchado que lanza un ramo de flores. Están también sus “grafitis” y grabados dedicados a las ratas que, según el artista, “existen sin permiso, son odiadas, perseguidas y sin embargo están en grado de poner de rodillas a toda una civilización”. “Si eres sucio, insignificante y nadie te quiere, entonces las ratas son tu modelo”, escribió. Nacida en las calles, la obra de Banksy ha alcanzado precios estratosféricos en las subastas de arte internacionales (en 2014 una de ellas fue vendida an la Feria de Miami en 420 mil euros) y entre sus compradores figuran personalidades públicas como Brad Pitt y Angelina Jolie.