Julio César Ceniceros / La Voz de Michoacán. Morelia, Michoacán.- La taquilla estuvo para llorar, pero ellos no pararon de reír. Así demostraron su gran profesionalismo anoche los comediantes Tony Balardi, Radamés de Jesús, Jaime Rubiel, Nora Velázquez La “Chabelita”, Luis Manuel Ávila “El peluche” y Ariel Manzano, quienes actuaron como los grandes ante un escaso público que se dio cita en el Teatro Morelos durante la visita de “La Caravana del humor”. Los comediantes no demeritaron en absoluto su show, al contrario, pareciera que la conexión con los pocos asistentes se dio mucho más fácil, con atención casi personalizada. Y es que todos los comediantes de la caravana parecen tener un objetivo en común, y éste no se limita a hacer reír, sino a contagiar verdaderamente de humor a cada uno de los asistentes; no se puede contagiar algo que no se tiene, y tratándose de humor, a ellos les sobra para dar y repartir. Nadie, léase bien, nadie pudo contener las carcajadas. Para todos hubo, con chistes de todos los colores y temáticas. Ataques de risa Es tan intenso el gancho que el equipo de grandes comediantes logra con el público que, como en pocas ocasiones se ha visto, todos participaban e interactuaban. No faltaron los ataques de risa imposibles de contener. Jaime Rubiel, contagiado por las carcajadas de una mujer en las primeras filas, le dijo: “¿Cuánto me cobra por quedarse a la segunda función, señora?”. Uno de los momentos de mayor interacción con el público lo logra el maestro de la comedia Tony Balardi… y sus nalgas. Las pompas de Balardi de pronto se convierten en protagonistas de la noche, y comienza como lluvia de chistes desde el público, múltiples voces, completando la frase: “Yo tengo nalgas de…” “¡De burro… pero de planchar!” escucha entre el público, y comienza luego uno tras otro de una manera tan increíble que casi podriamos jurar que se trata de paleros. “¡De aguja… porque nomás tienen el puro agujero!”“¡De cebolla… están pa’ llorar!”, “¡De ovni… todos saben que existen pero nadie las ha visto!”. Con tal de hacernos reír, hace de todo Tony es de esos comediantes clásicos mexicanos; hasta tiene su propia canción de apertura, aunque suene muy anticuado en una época dominada por los standuperos. Pero eso a él no le importa. Desde el primero momento aparece en escena bailando, sin temores al ridículo, enseñando con el ejemplo que la vida es para reír aunque el teatro no esté lleno. Con tal de hacernos reir, Tony Balardi es capaz de actuar como Tony La Barbie, o como Tony el joto. Pero sin duda, en lo que respecta a los chistes de gay, las palmas se las lleva Radamés de Jesús quien, luego de tanto escándalo, por fin encontró en “La caravana del humor” un escenario ideal para demostrar que sí tiene talento, aunque muchos lo duden; honor a quien honor merece y, en cuestión de comedia, Radamés se gana el respeto con total profesionalismo y enorme dominio de escena.