Londres. — Las federaciones internacionales de deportes que compiten en los Juegos Olímpicos de verano dijeron el martes que están preparados para gestionar "casos individuales" de dopaje ruso, en lugar de apoyar una sanción general sobe el equipo ruso para los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro. La Asociación de Federaciones Internacionales Olímpicas de Verano, que representa a los entes reguladores de 28 deportes en el programa olímpico, dijo reconocer la "gravedad y extensión de las actividades de dopaje en Rusia" detalladas por el informe del investigador de la Agencia Mundial Antidopaje Richard McLaren. El reporte, que acusa al Ministerio ruso de Deportes de supervisar un programa de dopaje a gran escala entre sus atletas olímpicos, enumeró 20 deportes del programa estival como implicados en la conspiración. La AMA y otros responsables de lucha antidopaje pidieron al Comité Olímpico Internacional que considere la suspensión de todo el equipo olímpico ruso de los Juegos de Río de Janeiro, una medida sin precedentes. La junta ejecutiva del COI tenía previsto reunirse el martes en una teleconferencia para estudiar sus opciones. Es posible que la decisión que tome el COI no sea definitiva, ya que el Tribunal de Arbitraje del Deporte tenía previsto fallar el jueves sobre la apelación rusa a la inhabilitación que impuso a su equipo de atletismo la Federación Internacional de Atletismo (IAAF) con vistas a los Juegos de Río. La asociación de deportes olímpicos de verano dejó claro que no está a favor de una sanción general. La ASOIF (como se conoce la asociación por sus siglas en inglés), pidió a la AMA que "proporcione de inmediato toda la información detallada a las 20 federaciones internacionales afectadas para que puedan empezar tan pronto como sea posible a procesar los casos individuales según sus propias normas y regulaciones, y en línea con el Código de la AMA y la Carta Olímpica". "Es importante centrarse en la necesidad de justicia individual en todos estos casos", afirmó el grupo. ASOIF añadió que respalda todas las decisiones de sus federaciones, "incluidas aquellas que tengan en cuenta la responsabilidad colectiva de organizaciones bajo la gobernanza" de las federaciones internacionales. Eso implica que en lugar de instaurar un veto general, las federaciones podrían inhabilitar a equipos rusos de deportes concretos. Eso es lo que ha hecho la IAAF, que vetó al equipo ruso para los Juegos de 2016 tras informes previos de la AMA sobre el dopaje en Rusia. "ASOIF respalda por completo una política de tolerancia cero para llevar ante la justicia a todos los individuos relacionados con cualquier infracción antidopaje", indicó en un comunicado. La posición de la asociación está en línea con unas declaraciones recientes del presidente del COI, Thomas Bach, que mencionó la necesidad de alcanzar un equilibrio entre "la responsabilidad colectiva y la justicia individual". Bach dijo la semana pasada que se había deportes de verano en el reporte McLaren, las federaciones internacionales tendrían que decidir sobre la elegibilidad de deportistas rusos "de forma individual". El informe McLaren desveló un programa estatal de dopaje que abarcó 28 deportes, en disciplinas tanto de los juegos de invierno como de verano. El programa funcionó entre 2011 de 2015. La investigación documentó 312 casos de pruebas positivas en los que el viceministro ruso de Deportes ordenó al personal de laboratorio no informar a la Agencia Mundial Antidopaje. En la trama también participó el FSB, la versión actual del KGB soviético, según el reporte. El documento también recoge más detalles sobre los cambios de muestras de dopaje para proteger a los atletas rusos dopados, entre los que habría medallistas, en los Juegos de Invierno de Sochi en 2014. "Estoy consternado y devastado por lo que ha estado ocurriendo", dijo Paul Melie, responsable de la agencia antidopaje canadiense, tras la publicación de los hallazgos el lunes en Toronto. "Y sólo puedo imaginar lo traicionados que se sienten hoy los atletas limpios del mundo ante esta evidencia". "La AMA insiste en la imposición de las consecuencias más serias para proteger a los atletas limpios de la lacra del dopaje en el deporte", dijo el presidente de la agencia, Craig Reedie, que también es miembro del COI. Pero no hay garantías de que se imponga una sanción general. Una decisión en ese sentido tendría multitud de ramificaciones políticas relacionadas con un país que envió el tercer grupo de atletas más grande (más de 430) a los Juegos anteriores, que se celebraron en Londres hace 4 años. El caso pone al COI en la situación de fallar contra uno de sus principales patrocinadores, un país que gastó más de 50.000 millones de dólares para organizar los Juegos de Invierno en Sochi hace sólo dos años. "No se le puede quitar el derecho a participar en los juegos a un atleta que se ha clasificado con todas las de la ley y no ha sido hallado culpable de haberse dopado", expresó el presidente de la federación internacional de gimnasia Bruno Grandi. "Las suspensiones generalizadas nunca han sido ni serán justas". La gimnasia es uno de los deportes que no son mencionados en el informe. En cambio, la lucha representó 28 de los 132 casos positivos que no se reportaron. El jefe de esa federación internacional, el serbio Nenad Lalovic, dijo a The Associated Press: "sin duda acataremos las decisiones del COI". Tanto si el COI publica su decisión el martes como si simplemente prepara el terreno para tomarla más tarde, el veredicto podría apelarse ante el TAS. La corte de arbitraje tenía previsto decidir el jueves sobre la sanción al equipo ruso de atletismo.