Roberto Huitrón / La Voz de Michoacán. Los Reyes, Michoacán.- Con la participación de 17 escuelas de educación primara, 4 secundarias, 7 organizaciones, entre las que destacaron la Unidad Municipal de Protección Civil y Bomberos (UMPCyB); Cruz Roja Mexicana, delegación los Reyes; Pentatlón Militarizado; 14º Cuerpo de Caballería de Defensas Rurales y la Asociación de Charros, todos encabezados por el contingente del ayuntamiento reyense, a la vanguardia el presidente municipal, Jesús Álvarez Hernández, el secretario del ayuntamiento, Ricardo Vega Villanueva, el cuerpo de regidores y el diputado federal J. Guadalupe Hernández Alcalá. Detrás de la vanguardia participaron los funcionarios de primer nivel, Sindicato de Empleados Municipales, personal del Sistema de Agua Potable y Alcantarillado Descentralizado (Sapad) de Los Reyes, también los contingentes de la Estancia del Adulto Mayor; jubilados y pensionados, así como las escuelas de nivel primaria principalmente, en total más de 300 personas, desfilaron por las principales de la ciudad por el CCVI aniversario del inicio de la lucha de Independencia. Una vez realizado los honores a la bandera, el alcalde dirigió un encendido discurso donde fustigó al capital, “es el Dios moderno, a cuyo pies se arrodilla y muerden el polvo los pueblos de toda la Tierra. Ningún Dios ha tenido mayor número de creyentes ni ha sido universalmente adorado”, externó. Agregó que, “Hoy más que nunca debemos vencer a esos enemigo perversos que solo buscan el beneficio particular, debemos voltear la mirada a nuestras comunidades”; “No fueron los ricos los que rodearon a Hidalgo en su empresa de gigante amigos, fueron los pobres, fueron os desheredados, fueron los parias los que amasaron con su sangre y con sus vidas la gloria…, la obra de la Independencia fue su obra, el triunfo contra el poder de España fue su triunfo, pero que no sirva ese triunfo para que nos echemos a dormir de la gloria”, manifestó. En un reconocimiento a Miguel Hidalgo manifestó Álvarez Hernández, que, “Con un puñado de valientes llaga a la cárcel y pone en libertad a los presos, va a la iglesia después, y congrega al pueblo y al frente de menos de cincuenta hombres arroja el guante al despotismo”, y concluyó, “Mexicanos, nuestro pasado merece un aplauso, ahora es preciso que conquistemos el presente, se ha cumplido con nuestro deber en las grandes luchas del pasado, pero falta que tomemos la parte que nos corresponde en las luchas del presente.
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