Astrid del Ángel/ La Voz de Michoacán “Cualquiera que revise un periódico de hace cien años notará que no existían las páginas de cultura, sino las páginas literarias, y siempre iba destacado el poema; había unos cuentos, algunas reseñas teatrales, pero la poesía siempre tenía un lugar preponderante”, aseveró la escritora e investigadora Beatriz Gutiérrez Müller, quien vendrá a Morelia para presentar su libro “Solón Argüello: antología poética”, el viernes próximo viernes 17 de noviembre, a las 17:00 horas, en el Centro Cultural Universitario (CCU). Era una poesía que dialogaba con los movimientos sociales y políticos, un ejemplo es la obra de uno de ello es la obra de Solón Argüello (1879-1913) que Gutiérrez reunió en este libro que forma parte de la Colección Maderistas. En entrevista con La Voz de Michoacán habló del amor que el poeta nicaragüense Salvador Arguello tuvo por México, así como de las dificultades que tienen los escritores para difundir su obra en la actualidad. ¿Cuál considera que es la relación entre arte y política? Arte y política van íntimamente ligadas, no hay poesía sin estar en un entorno, ni un entorno que no tenga una manifestación poética, sobre todo en esa época. Hoy las secciones de cultura presentan otras cosas, no las creaciones de los escritores; en aquel tiempo era muy importante, entonces se valora doblemente, porque la poesía era un vehículo para expresar ideas, sobre el mundo, sobre México, de la sociedad y ahí puedes detectar el surgimiento de los nuevos héroes, por ejemplo, cuando triunfa Madero, ya los poemas no son a Benito Juárez, a José María Morelos o a Cristóbal Colón, ya los poemas son a este nuevo movimiento, a la Revolución Maderista y sus héroes, no sólo Francisco I. Madero, sino también al pueblo de México. Es muy interesante ver como un movimiento social genera expresiones artísticas. Entonces considera que hacen falta espacios para promover la literatura. Hacen falta esta clase de espacios, que se han reducido con la desaparición de los suplementos culturales, ahora son poquísimos, puedo mencionar el espacio de La Jornada Semana. Antes había suplementos muy buenos en El Nacional, El Universal, el Excélsior, actualmente desaparecidos por completo. Los suplementos son un buen espacio para que los escritores puedan difundir sus creaciones, porque de otro modo, sólo es a través de libros y los libros son muy difíciles de imprimir, sobre todo para los escritores desconocidos, que son talentos y abundan, pero que no tienen el dinero o las influencias para sacarlos. Los suplementos culturales ayudaban en esta parte. Para más información consulte la edición impresa del 14 de noviembre.