Ciudad de México.- Con un desfile de leones, dragón, danzas y artistas chinos, el Museo Nacional de las Culturas del Mundo recibió esta tarde al Año del Gallo de Fuego. La Calle de Moneda en el corazón del Centro Histórico de la ciudad, donde se localiza el recinto, es espacio donde cientos de personas viven la experiencia que durará todo el día. Entre los participantes, con todo el colorido y bullicio que son capaces de hacer los artistas que han viajado por el mundo esparciendo la tradición y arte milenario de esa nación oriental, sobresalieron las compañías de danzas chinas y mexicanas, los talleres de pintura china y de cocina de ravioles impartidos, por el Instituto Confucio de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). De la misma manera, el público tiene la oportunidad de participar en los talleres que tocan algunas de las más longevas tradiciones de la región asiática en torno a diversas disciplinas contemporáneas, como cocina, dibujo, caligrafía y otros, a cargo de especialistas de China y México. Chinos y mexicanos se compenetran. De acuerdo con los organizadores, este fin de semana el museo festeja la llegada del año del Gallo de Fuego, que significa el número 4 mil 715 en el calendario chino tradicional y al mismo tiempo, forma parte del programa del Año de Cultura China con motivo del 45 Aniversario del restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre las dos naciones. Otras actividades recreativas y familiares son los talleres Ornamentos en plata, Piezas teñidas con cera de la etnia Miao, Técnicas de bordado de la etnia Miao y Papel cortado de la etnia Shui, que tienen lugar en el patio del museo. Son impartidos como parte de la exposición “Memoria de las manos. Esplendor y colorido del patrimonio de Guizhou”. Al dar inicio la presentación de las canciones y las danzas de Guizhou y México, familias enteras conocieron la Danza de la etnia Dong, la Canción de la cigarra, Lusheng recital, y La mañana de Miao Ling, y música tocada por hojas de árbol con las que se interpretó la “Canción de la montaña” y el “Cielito lindo”, con artistas del grupo Guizhou Colorido. La agrupación Yodoquinsi (Tierra de muchos colores), un grupo que hace música con sus instrumentos de origen prehispánico e indígena fundado en 1987 bajo la dirección de Víctor Acevedo Martínez, más que recrear la música prehispánica, compone a partir de la búsqueda en los instrumentos, uniendo timbres, frecuencias, ritmos y formas musicales. El colofón de la fiesta que amalgama la tradición china y mexicana, se prolongará esta tarde-noche con un mariachi tradicional mexicano. Este domingo continuará la fiesta a partir de las 12:00 horas, con los talleres de papel recortado y sobre el arte del té, y la presentación de la revista “China Hoy”.