Ciudad de México.- La decisión de los órganos de gobierno del Senado de reconocer a Dolores Padierna como coordinadora del PRD generó una fractura en esa bancada. Al formalizar que Padierna es la sustituta de Miguel Barbosa, quien fue relevado del cargo y posteriormente renunció por apoyar al presidente de Morena, Andrés Manuel López Obrador, un bloque de 10 legisladores afines a Barbosa anunciaron su salida de esa fracción parlamentaria. Raúl Morón, quien disputaba el liderazgo de la coordinación a Padierna, informó que conformarán un frente parlamentario, el cual, aunque no está en la ley, los convierte en el grupo más grande de votos, con 11, luego del PRI y del PAN. Aunque el senador Armando Ríos Piter también salió de la bancada del PRD, al haber renunciado al partido, no confirmó su integración al nuevo frente de ex perredistas. De esa forma, el PRD, que inició en esta legislatura con 22 senadores, registró un rompimiento, que le impedirá ir en conjunto para el resto de pendientes que quedan en poco más de un año con cinco meses que le quedan a la legislatura. Los pendientes van desde el nombramiento del Fiscal Anticorrupción, las reformas a la Ley Orgánica de la PGR para crear la Fiscalía General de la Nación hasta los lineamientos que normarán y delimitarán la política exterior mexicana ante la nueva relación con Estados Unidos. Con el aval de la presidenta del PRD, Alejandra Barrales, quien fue impugnada por regresar a su escaño, Padierna llamó a la unidad y “a estar por encima de cálculos políticos, calenturas electorales e intrigas”. Barrales dijo: “Que los que han renunciado a la bancada, renuncien al PRD”.