París. Jelena Ostapenko eligió el mejor momento posible para levantar el primer trofeo de su carrera profesional. La tenista letona, ubicada en el puesto 47 del ranking mundial y sin preclasificación en el Abierto de Francia, conquistó su primer título en el circuito de la WTA al vencer el sábado 4-6, 6-4, 6-3 a Simona Halep en la final en Roland Garros. Dos días después de cumplir los 20 años, Ostapenko se convirtió en una de las más improbables campeonas de Grand Slam al superar a una rival que hubiese escalado al primer puesto del ranking mundial con una victoria. Halep también buscaba su primera corona en un major. “Este siempre ha sido mi sueño”, expresó Ostapenko en una entrevista a pie de cancha. 20 años. Un presente fantástico y un futuro seguramente aún mejor. ¡Jelena Ostapenko es la campeona de #RolandGarros! pic.twitter.com/rayEATvJby — Tenis Zone (@TenisZoneTW) 10 de junio de 2017 La letona remontó tras perder el primer set y estar abajo 3-0 en el segundo. Halep desperdició tres puntos de quiebre cuando tenía la oportunidad de irse arriba 4-0, pero Ostapenko finalmente ganó ese game, y los tres siguientes, para finalmente definir el partido en tres sets. “Por supuesto que estaba nerviosa”, señaló sobre su remontada. “Traté de mantenerme agresiva, sabía que si seguía siendo agresiva, eventualmente mi juego iba a salir a flote”. En el tercero, Ostapenko exhibió el temple de una veterana, al ganar los cinco últimos games después de estar abajo por un quiebre y 3-1. También tuvo algo de suerte, al conservar una delantera de 5-3 cuando un revés suyo golpeó en la red, se elevó y cayó del otro lado de la cancha. Poco después, atinó un par de winners para bajar el telón. Ostapenko superó a Halep 54-8 en la cuenta final de winners, aunque también cometió muchos más errores no forzados, 54-10. Halep, una rumana de 25 años, jugó su segunda final de un Grand Slam, tras perder en 2014 ante Maria Sharapova en el mismo escenario. Ostapenko jugó en su octavo torneo de Grand Slam, aunque nunca antes había superado la tercera ronda. Tampoco había ganado un torneo profesional. La última mujer que conquistó su primer título en un major fue Barbara Jordan en el Abierto de Australia de 1979. La letona aprovechó que el cuadro femenino no contaba con algunas de las mejores tenistas del mundo, como Serena Williams (embarazo), Maria Sharapova (no recibió wild card tras suspensión por dopaje) y Victoria Azarenka (maternidad). La número uno del mundo, Angelique Kerber, perdió en la primera ronda.