Redacción web/ La Voz de Michoacán. Morelia.- La Secretaría de Salud de Michoacán (SSM), asegura que los productos pesqueros que se expenden en la entidad en los diversos puntos de venta, son seguros para el consumo humano, es decir que cuentan con los estándares de calidad, refrigeración y conservación, que garantizan que no hay riesgo de padecimientos gastrointestinales. Lo anterior debido a que los establecimientos que venden pescados y mariscos en restaurantes, pescaderías, ostionerías y mercados han resultado dentro de norma previo muestreo realizado por personal sanitario, no así los sitios y puestos ambulantes, según los análisis dados a conocer por la Secretaría de Salud de Michoacán a través de su Dirección de Protección contra Riesgos Sanitarios (Direpris). Es decir, que la venta de productos pesqueros crudos es segura en centros comerciales, mercados y comercios móviles si se saben elegir antes de adquirirlos; el riesgo está por tanto en los establecimientos en la vía pública, a quienes también se les invita a mejorar la higiene del negocio, a desinfectar el agua con la que lavan los trastos y en la preparación de los platillos. Las muestras las realiza el personal de las Jurisdicciones Sanitarias que se desplazan por toda la entidad, pero con mayor intensidad a los sitios de mayor concentración turística o de mayor consumo de pescado, moluscos, crustáceos, moluscos bivalvos, productos del mar cocidos y crudos, agua a granel, agua embotellada, hielo a granel en barra y hielo envasado. En estos muestreos que se ejecutan de manera aleatoria, no se detectó presencia de vibrio cholerae, ni tampoco salmonella. De ser así el producto debe ser decomisado para evitar el consumo humano y la aparición de posibles enfermedades en la población. Ante tal situación la SSM recomienda tomar precauciones al adquirir productos pesqueros, para reducir las enfermedades transmitidas por alimentos en mal estado, así que es necesario que al comprar pescados, mariscos y moluscos se observe que los ojos y piel sean brillantes, translúcidos y convexos, y que no tengan aspecto viscoso (pegajoso). Además las agallas deben ser rojo intenso y las escamas no deben desprenderse fácilmente. Cuando se trata de camarón y cangrejo, deben tener cáscara brillante y no se deben desprender patas y antenas. Los ostiones, almejas y mejillones tienen que estar en su concha cerrada o ligeramente abierta y, en general, que ninguno huela mal.