Eduardo Ruiz Muñoz / La Voz de Michoacán. La Piedad, Mich.- Cuatro sujetos, al parecer relacionados con varias ejecuciones ocurridas en Santa Ana en las últimas semanas fueron detenidos por elementos policiacos y entregados al personal del Ejercito Mexicano. En respuesta a dichas acciones, arribaron a la zona limítrofe de Guanajuato y Michoacán elementos de las Fuerzas Especiales de Seguridad a formar un cerco de seguridad e impedir el paso de delincuentes de origen michoacano hacia el territorio guanajuatense. En los puentes Cabadas y Morelos se han instalado retenes de las Fuerzas Estatales de Seguridad, coordinándose con la policía municipal para realizar revisiones a todos los vehículos que ingresan al territorio de Pénjamo. Respecto a los detenidos, se supo que un joven de apenas 18 años de edad era quien en las últimas semanas había estado llenando de sangre las calles de Santa Ana Pacueco. A él se le atribuye su participación en por lo menos cinco ejecuaciones; mientras que a los otros se les investiga su presunta participación en hechos de violencia registrados en la zona. Los cuatro fueron detenidos tras un operativo de la policía municipal que acudió en auxilio de una persona que había sido despojada de su motocicleta. Los hechos ocurrieron cuando en la comandancia de policía de Santa Ana se recibió el reporte de un asalto a mano armada en la zona cercana al Río Lerma. En esos momentos, el personal del Ejercito Mexicano participaba en un operativo de vigilancia y se sumó a las tareas de localización del presunto ladrón. La policía ubicó a uno de los ladrones en la calle Margen del Río donde el presunto delincuente tiró la motocicleta que había sido robada para después huir corriendo y pidiendo el apoyo de sus compinches, por lo que de entre el caserío salieron tres sujetos que intentaron ayudar a su compañero pero fueron rodeados por los uniformados. Al someterlos, a uno de ellos le encontraron una pistola calibre 9 milímetros, mientras que otros de los malandrines portaban entre sus ropas varias dosis de cristal. Al ser llevados a barandilla y checarles sus antecedentes penales, se conoció que uno de ellos responde al nombre de Juan Rafael Arévalo Tovar “El Rafita” de 18 años, con domicilio en la calle Río Consulado de La Piedad y quien portaba el arma al momento de la detención y al que, según la Policía Ministerial se le relaciona con cuatro o cinco homicidios. El arma que le fue asegurada, al parecer es la misma que se utilizó en otros crímenes ocurridos con anterioridad y según lo declarado, en las próximas horas iban a cometer otra ejecución.
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