Eduardo Ruiz/ La Voz de Michoacán. Yurécuaro.- La muerte de una niña de edad dentro del albergue para jornaleros agrícolas de Yurécuaro sacó a relucir una gran cantidad de irregularidades que, desde hace algunos años se han venido cometiendo al interior de dicho centro. Abusos como cobro de renta a las familias que ahí buscan refugio, hacinamiento, falta de servicios básicos y elementales, son algunas de las quejas que desde hace algunos meses habían denunciado las autoridades municipales de Yurécuaro ante el director de Albergues en el Estado, Agustín Bautista. Las autoridades municipales de Yurécuaro han solicitado la intervención de la Comisión Estatal de Derechos Humanos para que elabore un diagnóstico sobre lo que ocurre con las familias de jornaleros que en ese lugar se hospedan. Resulta que el pasado martes 11 de marzo, aproximadamente a las tres de la tarde, el jornalero Paulino Gálvez Ortiz, originario de la comunidad de Tierras Blancas, Cochuapa en el estado de Guerrero, reportó la desaparición de su hija Adelia Gálvez Cuellar de 6 años. Al pedir apoyo a las demás familias refugiadas en el albergue, comenzaron una búsqueda que terminó cuando se localizó el cuerpo de la menor flotando al interior de un aljibe, mismo que nunca ha contado con una salvaguarda o tapadera a pesar de que ahí cohabitan cientos de niños. Se dio aviso a las autoridades policiacas y el personal de la PGJE se hizo cargo de llevar a cabo las diligencias para el rescate del cuerpo y su traslado a la morgue, donde se le practicó la necropsia correspondiente. “Esta tragedia es un reflejo de la situación que impera en dicho lugar y que con anterioridad habíamos denunciado”, señaló el Coordinador de Fortalecimiento Social de Yurécuaro, Cesar Murillo Delgado.