Lázaro Cárdenas, Mich.- Campesinos y ejidatarios de Guacamayas, en el estado de Michoacán, y el Naranjito, en el de Guerrero, unieron sus demandas para exigir se les pague indemnización por lo que consideran daños a sus cultivos por las emanaciones del incendio de un patio de residuos industriales de Fertinal, en abril pasado. Ayer, Luis León Martínez y Constantino mercado reyes, denunciaron que han venido tocando puestas de dependencias oficiales en este puerto, donde puedan poner sus quejas sobre los daños y afectaciones a poco más de mil 500 hectáreas de diversos cultivos, todo ello por la contaminación que emano el 28 de diciembre el patrio de azufre de la empresa Fertinal, que se vio envuelto en una conflagración. Luis León Martínez, indicó que la segunda floración de este año, en el caso del mango, “no cuajo” porque los retoños se secaron debido a los humos contaminantes. Explicó que las pérdidas en el ejido de Guacamayas alcanzarían unas 800 hectáreas, con un monto no cuantificado, pero que es un monto grande. Ambos representantes de labriegos argumentaron que la propia Sagarpa local ha verificado y validado los daños, pero en Profepa, que es donde buscan denunciar el hecho, “no hay siquiera quien les reciba la queja” y no cuentan ni les han otorgado ningún seguro para daños de esta naturaleza. Junto con el mango, detalló que cultivos como maíz y plátano, unas 130 en total, también se vieron afectadas. De cocoteros los cultivos dañados alcanzan las 794 hectáreas y lo que se busca es una indemnización por el cultivo de seis meses, que es lo que se dañó, lo mismo que unas 10 hectáreas de papaya, chile, melón y maíz. En el caso del mango, “somos honestos el daño fue al 50 por ciento”, señaló Constantino Mercado. Explicó que “han tocado puertas y lo único que nos han dicho es que pongamos una demanda, pero nadie la recibe y no nos va a quedar otra que manifestarnos”.