Si la serie final de la NBA se reanudara el viernes, no habría manera de que LeBron James pudiera jugar. Pero el siguiente partido será hasta el domingo, y el astro del Heat planea estar listo para entonces. Con su forma de andar aún afectada por calambres severos y deshidratación, y sintiendo los efectos de una noche de insomnio debido a que tuvo que acudir varias veces al baño —secuela inevitable de tener que llenar su cuerpo de líquidos_, James insistió en que jugará cuando el Heat de Miami y los Spurs de San Antonio se enfrenten en el segundo partido de la serie por el título de la liga. "Estaré uniformado el domingo", aseguró James el viernes. "Debo estar al 100% el domingo. Obviamente, hoy voy a tomar las cosas con calma. El personal de entrenamiento dijo que hoy debo tomármela con calma. Dar al cuerpo otro día para recuperarse. Mañana debo estar repuesto completamente, y tengo todo el día del domingo para estar listo para la noche". Cuando él estuvo activo el jueves, el Heat estuvo bien. Cuando él estuvo fuera, Miami lo resintió. Con una ventaja de siete puntos en un momento dado del cuarto período, el Heat se desmoronó en los últimos minutos, y la fea salida de James fácilmente pudo haber tenido algo que ver con eso. San Antonio tenía ventaja de 94-92 después de que él anotó cuando restaban 4:09 minutos de juego, pero 10 segundos después salió de manera definitiva de la cancha y ya no se podía mover. A partir de ese momento los Spurs anotaron 16 puntos frente a tres en contra. Erik Spoelstra, entrenador del Heat, no presentó excusas el viernes, pero sí defendió el esfuerzo del astro de los dos veces campeones defensores de la NBA. "Él es un competidor al más alto nivel", dijo Spoelstra. "Así que lo estaba matando estar fuera de la cancha, pero uno también tiene que cuidar la salud propia. Miren, el 99,9 ( de la gente nunca ha presionado su cuerpo a ese nivel, a ese nivel en el que uno ha pasado el punto en el que el tanque está vacío y el cuerpo deja de funcionar adecuadamente. Pienso que es increíblemente admirable que un competidor y el mejor jugador en este deporte a este nivel presione su cuerpo constantemente hasta pasar ese punto". El asunto de los calambres seguía siendo tema de conversación el viernes, como que Spoelstra reveló que James tomó siete píldoras contra calambres durante el juego. Por otro lado, el aire acondicionado estaba trabajando nuevamente en el AT&T Center y la NBA informó que un interruptor defectuoso ocasionó el problema. Los eventos programados para este fin de semana en el estadio, incluido un concierto el viernes y un juego de la rama femenina de la NBA el sábado, proseguían como estaba programado. Además, Gatorade emitió una disculpa por algunos tuits que bromeaban en torno a los calambres sufridos por James, quien es un patrocinador de Powerade, rival de Gatorade en el mercado de bebidas energéticas para deportistas. Por su parte, el comisionado Adam Silver dijo a The Associated Press que habló con el agente de James, Rich Paul, y con el representante Maverick Carter para saber sobre el estado de salud del cuatro veces Jugador Más Valioso. "Ambos me aseguraron que estaba bien", comentó Silver. "Todos estamos de acuerdo en que fue un incidente desafortunado".