Astrid del Ángel / La Voz de Michoacán. Un recorrido que permite conocer la vida y obra del artista plástico Raúl Anguiano nos ofrece el Centro Cultural Clavijero (CCC). El próximo 26 de febrero, el pintor cumpliría 99 años de edad, por lo que es buen pretexto para disfrutar desde los dibujos infantiles, hasta delicadas piezas de su etapa de madurez, donde la figura femenina tiene un espacio preponderanteen esta muestra. Obras de gran diversidad Los muros de la sala 6 de este centro cultural se encuentran ataviados con dibujos, litografías y pinturas, muchos retratos de mujeres, la mayoría con miradas esquivas, que intrigaban a los paseantes que acudieron a la inauguración que tuvo lugar la noche del pasado viernes, para ver de cerca la obra del originario de Guadalajara. Además, en el pasillo, vitrinas con reconocimientos, papeles personales, libretas con bocetos y fotografían antiguas nos narran la historia del que recibió el Premio nacional de ciencias y artes en el año 2000. La versatilidad del artsita tapatío se muestra en algunas ilustraciones de dichos populares, más adelante las finas líneas nos revelan su gusto por la figura femenina, sus Venus de todos tamaños, pintadas desnudas, o aquellas de rasgos indígenas con iguanas en la cabeza se plasman con diversas técnicas y de distintos materiales. En otra sección nos presentan sus murales, en bocetos trazados en papel y fotografías que muestran al retratista en acción. “El desarrollo de la Venus” es una obra que sin duda llama la atención, ya que el trabajo hecho a lápiz tiene un efecto de tercera dimensión. Por su sólida trayectoria, Raúl Anguiano recibió distintos honores, como la Orden al mérito de la republica italiana grado comendador, en 1977. La exhibición nos revela curiosidades del artista, como el hecho de que le fue regalado un perro de raza xoloscuintle, porque todo pintor mexicano debía tener uno (como lo habían hecho Frida Kahlo y Diego Rivera). También hay varias imágenes de Brigita, una extranjera que se convirtió en promotora y compañera de Anguiano. Pero su obra no se limitó a la pintura de caballete o los murales que recuerdan la historia del país exhibidos en edificios públicos, la obra en cerámica no es menos prolífica; también hay muestras de esculturas en bronce y algunos tapetes tejidos, adornados con seductores diseños.