Notimex / La Voz de Michoacán Jerusalén, 6 May- Israel aseguró que no desea intervenir en la guerra civil en Siria y que el objetivo de sus ataques cerca de Damasco son las bases del Hezbolá, sin embargo el régimen sirio advirtió que elegirá el momento para responder a las agresiones. El gobierno israelí transmitió a Siria mediante un canal diplomático que “no desea intervenir en la guerra civil” y explicó que su objetivo son sólo las bases del grupo chiíta Hezbolá, al que acusa de almacenar armas procedentes de Irán, según el diario local Yedioth Ahronoth. El veterano legislador israelí Tzachi Hanegbi, un hombre de confianza del primer ministro Benjamín Netanyahu, afirmó que los ataques aéreos israelíes en territorio sirio no pretenden debilitar el régimen del presidente Bashar al-Assad ante una rebelión que dura más de dos años. En entrevista a Radio Israel, Hanegbi declaró que el gobierno de Netanyahu quiere evitar “un incremento de la tensión con Siria dejando claro que si se produce actividad es únicamente contra Hezbolá, no contra el régimen sirio”. El legislador agregó que Israel no ha reconocido formalmente los ataques aéreos en un esfuerzo para permitir al presidente sirio salvar su imagen. Sin embargo, Hanegbi advirtió que Israel está preparado para cualquier desarrollo de los acontecimientos si los sirios malinterpretan sus mensajes y que por lo pronto mantiene desplegados dos misiles interceptores Iron Dome cerca de las fronteras de Siria y Líbano. El régimen del presidente al-Assad ha condenado los ataques aéreos, consideró que suponen una “declaración de guerra” y amenazó con responder en la manera y el momento que lo considere más oportuno. “Siria responderá a la agresión israelí, pero elegirá el buen momento para hacerlo. No será ahora, porque Israel se encuentra en estado de alerta”, dijo un funcionario cercano al régimen sirio, quien sentenció “Esperaremos. Pero responderemos”. Israel atacó el domingo por segunda vez en 48 horas un centro de investigación militar en las afueras de Damasco, con el fin de destruir misiles procedentes de Irán y destinados al grupo chiíta libanés Hezbolá, El ataque perpetrado esta madrugada por la aviación israelí contra el Centro de Investigaciones y Estudios Científicos del Ejército sirio en Jamrayah tenía como objetivo, al igual que el ejecutado el viernes pasado, un depósito de misiles destinados a Hezbolá desde Irán. Según fuentes militares sirias, la aviación israelí utilizó munición con uranio empobrecido para penetrar las defensas del complejo de investigación militar de Jamrayah. “Cuando ocurrió la explosión sentí como si fuera un terremoto y después apareció un hongo gigante dorado de fuego. Esto prueba que Israel utilizó munición de uranio empobrecido”, indicó la fuente. El jefe del Ejército iraní, Masud Jazayeri, desmentió la presencia de armas de su país en las instalaciones que Israel atacó en Siria, tras rechazar la propaganda de los medios occidentales e israelíes que afirman que el objetivo del ataque era un depósito de armas iraníes. La cancillería siria ha enviado dos cartas a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y a su Consejo de Seguridad, en las que denunció que la agresión israelí ha causado “numerosos mártires” y la destrucción de objetivos militares y zonas civiles. También subrayó que la agresión de Israel muestra el vínculo entre Tel Aviv y los grupos terroristas que operan en Siria, incluyendo el Frente al-Nusra, con vínculos con la red Al Qaeda. En tanto, Turquía y varios países árabes han adoptado una postura de silencio sobre los ataques israelíes en territorio sirio, mientras Rusia expresó su preocupación y cree que las posibilidades de una intervención militar extranjera en Siria se han incrementado.