Agencias / La Voz de Michoacán. Republicanos y demócratas en el Senado trabajan hoy con afán en una nueva iniciativa que podría ser aprobada en las próximas horas, en una carrera contra reloj para evitar que Estados Unidos caiga en moratoria de pagos por primera vez en su historia. El nuevo empuje se produjo luego que el ala ultra conservadora republicana en la Cámara de Representantes rechazó ayer martes una propuesta del Senado, insistiendo en su demanda de condicionar cualquier iniciativa a cambios en la Ley de Salud Asequible u Obamacare. El rechazo dejó enteramente en manos del líder demócrata en el Senado Harry Reid y su contraparte republicano Match McConnell la responsabilidad de buscar un acuerdo que genere respaldo suficiente en ambos partidos para poner fin a la crisis legislativa. Bajo la nueva propuesta, el gobierno sería reabierto hasta el 15 de enero, el techo de la deuda se elevaría hasta el 7 de febrero, además se establecería una conferencia que deberá concluir para diciembre 13 la negociación sobre el presupuesto y el déficit. De igual modo obligaría al gobierno a verificar el ingreso de quienes reciban subsidios para comprar seguros de salud bajo la ley de salud, a fin de evitar fraudes, en lo que sería previsión relacionada a Obamacare. No está claro si está ultima previsión será suficiente para generar el respaldo del ala republicana afiliada al movimiento conservador del Partido de Té que ha rechazado hasta ahora ceder en su demandas sobre la ley de salud. Sin embargo, la cadena de noticias CNN informó, citando fuentes legislativas que la nueva iniciativa parecería haber generado el respaldo necesario para llevarla al pleno de ambas Cámaras. Fuentes legislativas dieron a conocer también que esta vez el primer voto será celebrado en la Cámara baja, en una temprana medición sobre el potencial de la propuesta para llegar al escritorio del presidente Barack Obama y ser promulgada como ley. De no aprobarse un nuevo techo de endeudamiento para el gobierno para este 17 de octubre, Estados Unidos se vería forzado a declarar una moratoria de pagos. Sin embargo, aún antes del vencimiento de esa fecha, los eventuales efectos para el país derivados de una potencial moratoria empezaron a manifestarse. La calificadora Fitch Ratings anunció el martes su decisión de colocar en revisión negativa la deuda soberana de Estados Unidos, que mantiene aún la máxima calificación, debido al estancamiento en las negociaciones para aumentar el límite de la deuda en el país. En un comunicado, la agencia refrendó la calificación de AAA a la deuda soberana estadunidense, aunque advirtió que el estancamiento político en el Congreso aumenta el riesgo de una suspensión de pagos de las obligaciones financieras estadunidenses.