El Papa Benedicto XVI concluyó hoy sus ejercicios espirituales de Cuaresma y retomó las últimas actividades públicas de su pontificado, que concluirá el próximo jueves. Seis días permaneció el líder católico aislado del mundo, rezando y escuchando las meditaciones del cardenal Gianfranco Ravasi, presidente del Pontificio Consejo para la Cultura del Vaticano en la capilla "Redemptoris Mater" del Palacio Apostólico de Roma. En un discurso improvisado, ante cardenales y miembros de la Curia Romana que lo acompañaron en el retiro, el líder católico reflexionó sobre la creación y la belleza, que va de la mano con la verdad no obstante los males del mundo actual. "El maligno quiere siempre ensuciar la creación para contradecir a Dios y hacer irreconocible su verdad y su belleza", advirtió. "Creer no es otra cosa que, en la oscuridad del mundo, tocar la mano de Dios y así, en el silencio, escuchar la palabra y ver el amor", añadió. Este sábado el Papa recibirá en audiencia al presidente de Italia, Giorgio Napolitano, mientras mañana domingo -al mediodía- presidirá la oración dominical del Angelus, en la cual se espera la participación de más de 100 mil personas.