Notimex/La Voz de Michoacán Dallas, Texas. El gobernador de Texas, Greg Abbott, aseguró hoy que la nueva ley estatal SB 4 que prohíbe las denominadas ciudades santuario y fomenta la cooperación de las policías locales con las autoridades federales de inmigración, es una herramienta para frenar la trata de personas y otros delitos. Abbott dijo que la trata de personas es un subproducto de las fronteras porosas y sostuvo que la ley SB 4, programada para entrar en vigor el próximo 1 de septiembre, ayudará a solucionar el problema. "Eliminará de las calles a criminales peligrosos, no detendrá a familias trabajadoras e hijos inocentes", aseguró el gobernador al hablar este lunes aquí ante la Conferencia Anual de la Asociación Sheriff de Texas. "Aprecio el fuerte apoyo que la ley ha recibido de tantos sheriffs en todo Texas", dijo Abbott. La ley SB 4, conocida también como ley contra ciudades santuario, autoriza a los policías locales el preguntar sobre el estatus migratorio de las personas durante cualquier detención, incluyendo paradas de tránsito. La ley, que entrará en vigor el próximo 1 de septiembre, contempla además castigar a los alcaldes, sheriffs, policías y jefes de policía, que no cooperen con las autoridades federales y cumplan las solicitudes de detención de los agentes de inmigración para mantener detenidos a los reclusos no ciudadanos sujetos a la deportación. La legislación establece que los gobiernos locales y los departamentos de policía que se nieguen a acatar las leyes de inmigración, podrían dejar de recibir millones de dólares en fondos públicos y enfrentar multas y otras sanciones. Además, impone sanciones de hasta 25 mil dólares por día a las jurisdicciones que violen sus disposiciones. La SB 4 ha sido criticada por múltiples jefes de policía a lo largo y ancho de la entidad. "Hay muchas opiniones al respecto”, dijo la sheriff del Condado de Dallas, Lupe Valdez. "Hay muchos gantes que no están de acuerdo con eso". Valdez dijo que la ley era una herramienta política para atacar a los texanos vulnerables. "A lo largo de la historia hemos escogido siempre a un grupo vulnerable para victimizar", dijo Valdez. "Ahora parece que son los hispanos". Valdez dijo que los números del Departamento de Seguridad Pública (DPS) de Texas muestran que solo el 1.6 por ciento de los delitos son cometidos por inmigrantes indocumentados. “¿Por qué no tomamos realmente el problema, en lugar de ir tras un grupo", cuestionó. En su discurso, el gobernador Abbott delineó la legislación aprobada durante la 85 sesión de la legislatura estatal para proteger y honrar a los oficiales de paz de Texas, incluyendo la designación del 7 de julio como Día de Oficial del Policía Caído, y la ley que convierte en un crimen atacar a un policía debido al uniforme que usan. "El respeto a nuestros oficiales de la ley debe ser restaurado en nuestra nación", dijo el gobernador. "La insignia que cada sheriff y cada oficial usa en su corazón es un recordatorio de una sagrada confianza, compromiso y contrato con cada uno de nosotros”, indicó Abbott.