Notimex/ La Voz de Michoacán Ciudad de México. Los fibroblastos, las células que forman la estructura de la proteína debajo de la superficie de la piel, dan resistencia y fuerza a la dermis, por lo que a través de ellas, se explica el por qué el proceso de cicatrización es diferente en cada persona. Un estudio reciente de la Universidad de Yale reveló que las diferencias en dichas células determinan que la reparación de una herida en personas de la tercera edad es más lenta. "Los subconjuntos de células pueden explicar diferentes potenciales de curación en diferentes personas", dijo la autora principal del estudio y especialista en biología molecular y celular, Valerie Horsley. https://youtu.be/sTu88wgxWtU De acuerdo con la información difundida por la institución universitaria, los expertos estudiaron la genética de los fibroblastos y analizaron sus efectos en ratones y humanos, encontrando múltiples diferencias en la forma en que estas células responden a las lesiones y los cambios que ocurren durante el envejecimiento. Después de una lesión, detallaron, un subconjunto de fibroblastos que normalmente producen células grasas, comienza a formar tejido cicatricial para reparar el tejido de la piel. La investigación también identificó el papel esencial de las células inmunitarias llamadas macrófagos, no solo para combatir las infecciones, sino también para curar heridas y restaurar la piel. El tejido cicatricial humano contiene más macrófagos y subconjuntos de fibroblastos; ambas poblaciones se reducen en las heridas de cicatrización deficiente de ratones de edad avanzada. Al identificar poblaciones funcionalmente distintas de células de la piel y revelar las señales que controlan su comportamiento, los científicos esperan desarrollar nuevas terapias dirigidas para completar la curación de heridas.