Javier Favela/La Voz de Michoacán Ciudad de México. El proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación para 2019 cierra la caja grande de la corrupción a los políticos y elimina los fondos discrecionales que han hecho florecer los acostumbrados “moches”, festejaron Alfredo Ramírez Bedolla, líder parlamentario de Morena, y Sergio Pimentel, delegado de Morena en Michoacán. Advirtieron que los diputados ya no serán intermediarios en la gestión de obra pública (lo que deja sin efecto las pasarelas de alcaldes y de gobernadores en el Palacio Legislativo de San Lázaro para buscar fondos etiquetados a proyectos de infraestructura). Ramírez Bedolla y Pimentel Mendoza subrayaron que el gobierno de López Obrador ha propuesto una reducción del 40 por ciento a los recursos del ramo federal 23, donde se encuentran los fondos discrecionales de infraestructura, las previsiones salariales de los funcionarios y los recursos del Fondo Nacional de Desastres (Fonden), con el propósito de “acabar con la corrupción”. Los dineros opacos del ramo 23 serían reasignados al ramo 33, por contar con más candados y con reglas de operación, arguyeron. Ambos lopezobradoristas sostuvieron que el presupuesto de Michoacán registrará un aumento histórico del 16.3 por ciento, “algo que no se veía desde hace más de 30 años en el estado”. Proyectaron que el gasto michoacano pasará de 54 mil a 63 mil millones de pesos para el 2019, “con caminos directos para que el recurso llegue a quienes lo necesitan, evitando intermediarios”. De aprobarse el Presupuesto Federal en los términos planteados, Michoacán recibirá 9 mil millones de pesos más que este año, prometieron los morenistas en conferencia de prensa. Rechazaron que vayan a ser afectados los recursos presupuestales en áreas estratégicas de la entidad. Y justificaron que disminuye el gasto del gobierno para cumplir compromisos de bienestar social. Alfredo Ramírez Bedolla llamó al gobernador Silvano Aureoles Conejo a instalar una mesa de trabajo con la 74 legislatura para articular un presupuesto balanceado, luego de identificar una partida de 2 mil millones de pesos de libre programación. Brenda Fraga, lideresa del PT, festinó la reducción de partidas proclives a “los moches”, y negó que desaparezca el apoyo a migrantes y al turismo: los programas cambiarán de nombre.