Catherine Licey y Lisa Mascaro, AP / La Voz de michoacán Washington. Tras un fin de semana sin avances para poner fin a un prolongado cierre parcial del gobierno, el presidente de Estados Unidos se mantiene firme en sus demandas de financiación para el muro fronterizo, mientras los empoderados demócratas de la Cámara de Representantes planean aumentar la presión sobre Donald Trump y los legisladores republicanos para desbloquear la situación. El domingo, Trump reiteró que consideraría declarar una emergencia nacional para tratar de eludir al Congreso y gastar dinero como le parezca. Ese paso sin dudas generaría respuestas legales. Tanto demócratas como republicanos criticaron la idea de que el presidente estadounidense utilice el poder ejecutivo para apropiarse del presupuesto, un acto que algunos han llamado autoritario. El presidente de Estados Unidos ha sido muy criticado por este cierre de gobierno, tanto por miembros de la política como por el público. Algunos medios de comunicación han nombrado esta situación como una de las peores cosas que ha pasado en la presidencia del empresario. Ante esto cuestionó a sus críticos, llamando a la prensa "locos lunáticos" a través de Twitter. Trump no dio signos de ceder en su petición de más de 5.000 millones de dólares para levantar el propuesto muro a lo largo de la frontera con México, aunque el domingo se ofreció a construirlo con acero en lugar de con concreto, una concesión lograda por los demócratas. Con la paralización del gobierno federal adentrándose en su tercera semana, muchos republicanos siguen nerviosos la situación mientras cientos de miles de empleados federales se quedaron sin salario y las interrupciones afectaron a la vida cotidiana de la población. Funcionarios de la Casa Blanca confirmaron el pedido de fondos de Trump en una carta al Capitolio tras una reunión celebrada el domingo con altos asesores del Congreso, dirigida por el vicepresidente, Mike Pence, que arrojó pocos avances. La misiva del director interino de la Oficina de Administración y Presupuesto, Russell Vought, solicitó financiamiento para una "barrera de acero en la frontera suroeste". Trump trató de presentar la barrera de acero como un avance, apuntando que a los demócratas "no les gusta el concreto, así que les daremos acero”. El presidente ya había sugerido que su definición del muro es flexible, pero los demócratas han dejaron claro que consideran que una medida así es inmoral y poco efectiva y que prefieren otros tipos de seguridad fronteriza. La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, tiene intención de aprobar leyes individuales para reabrir las agencias gubernamentales en los próximos días, empezando por el Departamento del Tesoro para asegurar que la gente reciba sus devoluciones de impuestos. Con esto se busca aumentar la presión sobre los senadores republicanos, algunos de los cuales están cada vez más nerviosos por la duración del cierre del gobierno.