Maricruz Rios / La Voz de Michoacán Michoacán inició el 2019 con pérdida de plazas formales, según reportaron el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y la Secretaría de Trabajo y Previsión Social. Durante el primer mes del año, la entidad registró 181 empleos menos que con los que terminó el 2018 al pasar de 447 mil 924 a 447 mil 743. Si bien en términos porcentuales se trata de una desaceleración mínima en la generación de empleos, apenas el 0.04 por ciento del total de la fuerza laboral en el estado, se debe tomar en cuenta que es el segundo mes de forma consecutiva que registra pérdida de plazas y el quinto mes durante el último año que tiene un número de empleos menor al inmediato anterior. A manera de desglose, Michoacán tuvo un aumento de 435 empleos eventuales en enero de 2019, con una pérdida de 616 de plazas permanentes. Es de destacar que Jesús Melgoza Velázquez, secretario de Desarrollo Económico, había anticipado desde enero que sería un inicio de año complejo para la economía local ante la crisis de desabasto de combustibles, situación a la que se sumó algunos días después el bloqueo de vías ferroviarias que mantuvieron durante prácticamente un mes maestros integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación. Si bien organismos empresariales como la Coparmex habían manifestado a nivel nacional cierto temor a la pérdida de empleos, escenario que Melgoza Velázquez no descartaba, el titular de la política económica de la entidad aseguró que al menos hasta finales del mes pasado se antojaba como algo complicado un indicador significativo al respecto, “pues dar de baja los empleos no sucede de un día para otro”. Si bien ni el IMSS ni la STPS ofrecen justificación alguna al alza o decremento de la cifra de trabajadores dados de alta debidamente ante el IMSS y se limitan a presentar las estadísticas, es de destacar que de los estados afectados por la llamada “guerra contra el huachicoleo”, impulsada por el gobierno federal, únicamente Michoacán, la Ciudad de México y el Estado de México presentaron números a la baja, mientras que Hidalgo, Guanajuato, Jalisco y Puebla mostraron un indicador al alza. Se espera desaceleración en el país A nivel federal, IMSS y STPS reportan 94 mil 646 empleos durante el primer enero del presidente Andrés Manuel López Obrador, cifra que supera por casi el doble al primer enero del exmandatario Enrique Peña Nieto, pues durante el primer mes de 2013 se reportaron 44 mil 169 nuevos empleos. Sin embargo, es de resaltar que la estrategia en materia de generación de empleo del sexenio anterior fue exitosa, logrando cifras récord en este apartado y dejando, de acuerdo con especialistas y firmas calificadoras, una economía sólida propensa a nuevas inversiones. El despacho de personal Manpower anticipó que el actual presidente se beneficiaría de esta “inercia” generadora de nuevas plazas al menos durante el primer mes de 2019, aunque en términos generales anticipaba al mismo tiempo una disminución importante en cuanto a lo alcanzado por la administración priista en su último año. Enero de 2019 presenta una desaceleración del 16.9 por ciento con respecto a lo generado en empleos durante enero de 2018 De acuerdo a una consulta de este despacho, sólo el 14 por ciento de las empresas planeaban realizar contrataciones, en tanto 5 por ciento preveía realizar despidos y un 5 por ciento manifestó incertidumbre respecto a qué hacer, esta ultima, situación que el despacho calificó de atípica, pues durante el sexenio pasado este indicador no pasaba del 1 por ciento. Según Manpower, el número de empleos para el tercer trimestre debió rondar las 350 mil plazas nuevas de continuar con una dinámica similar a la del último gobierno, pero con la administración morenista y problemáticas “estacionales”, esta cantidad debía reajustarse a unos 300 mil nuevos trabajos formales. Esto también se debería a que “los nuevos gobiernos tardan en detonar la inversión pública”. Estados ‘pobres’, los que perdieron empleos El IMSS y la STPS exhiben en sus estadísticas que en este arranque de año, y a pesar de políticas aparentemente dirigidas a beneficiar aquellas regiones con menor desarrollo económico, fueron precisamente las entidades más rezagadas, quitando la Ciudad de México las que presentaron retrocesos y pérdidas de empleos. Chiapas, Oaxaca, Guerrero, Tabasco y Michoacán presentan pérdidas de plazas que van del -3.1 al -0.04 por ciento, mientras que las entidades con mejores números fueron Quintana Roo y Querétaro, donde el empleo creció 7.8 y 5.6 por ciento, respectivamente. En lo que respecta a los incentivos fiscales y el aumento de sueldo mínimo en la franja norte del país, es de subrayar que todos los estados, salvo Baja California Sur reportaron incremento en su número de trabajos formales registrados.
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