Ap / La Voz de Michoacán Israelí. Una nave espacial israelí viajaba el viernes hacia la Luna, en lo que está marcando dos hitos en la historia de la investigación espacial: es el primer intento de Israel de lograr un alunizaje y es la primera exploración lunar financiada con inversión privada. La nave espacial israelí fue lanzada el jueves por la noche desde un cohete Falcon 9 de la compañía SpaceX. En realidad, el principal cargamento del cohete fue un satélite de comunicación para Indonesia. Israel busca convertirse en el cuarto país en alunizar con éxito, después de la extinta Unión Soviética, Estados Unidos y China. La sonda espacial _llamada Beresheet, que en hebreo significa génesis o “En el principio”_ tardará casi dos meses en llegar a la Luna. “Creemos que ya era hora de un cambio y queremos que el pequeño Israel llegue hasta la Luna”, dijo Yonatan Winetraub, cofundador de SpaceIL, una organización israelí sin fines de lucro que está detrás de la iniciativa. La Luna estaba casi llena y brillaba intensamente cuando el cohete se elevó en el cielo oriental. Una hora después del despegue, Beresheet ya estaba enviando datos y había desplegado con éxito sus patas de alunizaje, según SpaceIL. La nave de cuatro patas, apenas del tamaño de una lavadora, orbitará la Tierra en trayectorias cada vez más grandes hasta que sea capturada por la gravedad de la Luna y entre a su órbita. El alunizaje sería el 11 de abril en el Mar de la Serenidad. Las misiones Apollo de la NASA en las décadas de 1960 y 1970 tardaron unos tres días en llevar a los astronautas a la Luna, pero utilizaron unos enormes cohetes Saturno V. La misión Beresheet, de 100 millones de dólares, no pudo costear su propio cohete, ni siquiera uno pequeño, por lo que los organizadores optaron por un viaje compartido. Eso implicó un viaje mucho más largo. Actualmente la Luna está a casi 370.000 kilómetros (230.000 millas) de distancia. "Esta es una exploración espacial al estilo Uber, así que vamos de copilotos en el cohete", explicó en una conferencia de prensa en la víspera del lanzamiento Yonatan Winetraub, cofundador de SpaceIL, una organización israelí sin fines de lucro que respalda la misión.