Steven Wine, AP / La Voz de Michoacán EUA. Jorge Alfaro, el nuevo cátcher de los Marlins de Miami, apareció en el primer entrenamiento de primavera del equipo con una camiseta que decía "Hablo (basura) de ti en español", con una palabra más picante y menos publicable que "basura". Los angloparlantes de los Marlins entendían el mensaje. A instancias del director ejecutivo Derek Jeter, los Marlins comenzaron el año pasado a impartir clases de español para los coaches, y desde entonces el programa se ha expandido por toda la organización, desde su departamento de prensa y relaciones públicas hasta los responsables de análisis estadístico y el alto mando de la gerencia. Ahora, los jugadores de las ligas menores que hablan inglés están aprendiendo español, mientras que los hispanohablantes aprenden inglés. Todo es parte de una tendencia en las Grandes Ligas de tener equipos más bilingües. Queremos invertir en los jugadores fuera de sus capacidades atléticas, invertir en ellos como seres humanos", dijo Jeter. "La comunicación es lo primero y más importante cuando se habla de armar una organización con calibre de campeonato, lo que significa asegurarse de que nuestros jugadores de habla español hablen inglés, pero también que nuestros jugadores de habla inglesa hablen español". El programa educativo de Jeter para jugadores de las ligas menores va más allá del idioma. Se les enseñan habilidades para la vida y conciencia social: una ventaja para los jóvenes que esperan entrar en las Grandes Ligas en una de las ciudades más diversas del país. Los Marlins no están solos. Aproximadamente la mitad de los 30 equipos de las Grandes Ligas han comenzado a ofrecer clases de español a jugadores de habla inglesa en los últimos años, según Paul Mifsud, vicepresidente de las Grandes Ligas y quien trabaja con programas para los jugadores. El interés del público en lo que están haciendo los Marlins ha ayudado a mejorar tanto la calidad de este tipo de iniciativas como la conveniencia con la que los equipos están adoptando esto", aseguró Mifsud. "El liderazgo de los Marlins en esto es extremadamente útil. Nos gustaría que los 30 equipos hicieran todo lo posible por lograr que los jugadores tengan el nivel de educación que desean en estos temas, y creo que vamos en esa dirección". La camiseta de Alfaro se usaba en broma: el colombiano es bilingüe, está entusiasmado con su reciente cambio de equipo y ya es líder de un club, pero existen divisiones culturales potenciales en cualquier equipo, y el programa de educación de los Marlins ofrece un puente.