Juan Bustos / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. Mientras la Comisión Coordinadora del Transporte de Michoacán (Cocotra) pone especial interés en su ‘cacería’ de Ubers, hay un foco rojo que no ha sido atendido: la regulación del transporte escolar. Especialistas en este tema y varias organizaciones civiles alertan sobre el riesgo para los infantes y la falta de seguridad y ordenamiento en el servicio que prestan particulares en planteles. Particularmente en el Centro de Morelia, en escuelas públicas y colegios privados, se puede ver el servicio de transporte precario que brindan particulares en unidades antiguas, con nulas medidas de seguridad, incluso aplicando el ‘autosardina’ al llevar a niños en los espacios destinados para las maletas y hasta tres infantes adelante. Este medio solicitó información sobre el tópico a la Secretaría de Educación en el Estado y la Cocotra; sin embargo, no hubo respuesta en torno a los posibles planes y medidas de regulación, sin contar que además existe una propuesta en la ‘congeladora’ del Congreso estatal. En el Reglamento de Tránsito Estatal, en su capítulo segundo, “De la protección a escolares”, en seis artículos se abordan temas como promotores voluntarios viales para ayudar a las labores de tránsito en las inmediaciones de los centros escolares. En el artículo octavo del reglamento, que corresponde a las obligaciones de los conductores de transportes escolares y en general, sólo se señala que tienen que disminuir la velocidad de su vehículo y tomar las debidas precauciones cuando encuentren realizando maniobras de ascenso y descenso de menores en la vía pública. Asimismo, obedecer las señales de protección y las indicaciones de los agentes o promotores voluntarios de seguridad vial, y disminuir la velocidad a unos 20 kilómetros por hora en zonas escolares y extremar precauciones. Sin embargo, no se identifica ninguna regulación adicional en torno a los requisitos del transporte en términos de la seguridad y el perfil de los conductores, además de la relación entre escuelas, padres de familia y los particulares que ofertan el servicio.