Redacción / La Voz de Michoacán Ciudad de México. Leonardo Avendaño, egresado de la Universidad Intercontinental, fue amenazado de muerte por un matrimonio que iba a la iglesia Cristo Salvador, donde también estaba el sacerdote Francisco Javier “N”, quien fue vinculado a proceso por el delito de homicidio calificado del joven de 29 años. De acuerdo a Milenio, Jorge Cuadra, abogado del sacerdote, durante una audiencia en el Tribunal Superior de Justicia (TSJ), mencionó que un testimonio comentó que un hombre le había dicho al joven “que se iba a arrepentir”; sin embargo, estas declaraciones no quedaron asentadas la declaración ante el Ministerio Público. Asimismo, Jorge Cuadra le dijo al periodista Ciro Gómez Leyva que alguien manipuló la camioneta en la que encontraron el cuerpo de Hugo Leonardo y que incluso al joven le encontraron droga en la ropa. “Le encontraron droga en su ropa”. En el informe policial homologado, señalan, que encuentran droga dentro de los pantalones del ahora occiso y en el informe de criminalística la encuentran en otro lado”. El celular que podría condenar al párroco en caso Avendaño El teléfono celular del sacerdote Francisco Bautista Ávalos se convirtió en un elemento clave para determinar, hasta ahora, su culpabilidad en el asesinato del joven Hugo Leonardo Avendaño, ya que registros satelitales revelaron que estuvo en el lugar y momento del homicidio. En la segunda audiencia del caso, un juez de Control consideró que Bautista Ávalos es el autor material de asesinato, luego que el agente del Ministerio Público presentó los registros de geolocalización de los celulares del párroco y de Avendaño, quien fungía como auxiliar en su iglesia. En ellos se demuestra que el sacerdote y el joven estuvieron el pasado 11 de junio en la casa parroquial Cristo Redentor, en la alcaldía Tlalpan, desde las 23:04 horas hasta las 3:16 de la madrugada del día 12. Además, el último mensaje que envió Leonardo la noche del 11 de junio desde ese punto, donde vivía el sacerdote, decía: “Ya llegué pa, voy a dejar el celular prendido, cualquier cosa, me llamas”. Después, ambos dispositivos fueron ubicados juntos por la carretera Picacho-Ajusco y llegaron a las 3:48 horas a la colonia Héroes de 1910, en la parte alta de Tlalpan, donde fue encontrado el cuerpo de Leonardo a bordo de su camioneta.