El Universal/La Voz de Michoacán Mexico. Desde pequeña y por tener abuelos que eran refugiados españoles en México, Atala Sarmiento sentía la necesidad y el deber de regresar a las raíces familiares. La idea se acrecentó hace siete años cuando con su hoy marido, catalán de nacimiento, hablaron de que eventualmente vivirían en España. Hace poco su esposo recibió una oferta de trabajo en el pais europeo y ambos decidieron irse a vivir allá, lo cual harán el mes próximo. “¡Es una decisión que tomamos en pareja!. Además en este momento de mi carrera estoy enfocada a mi plataforma digital y no estoy atada a algo que me impida este cambio de vida”, comenta Atala. “Mi familia es española y la verdad, no sé por qué, desde niña he sentido un deber moral de ser la generación que le tocaba volver a la raiz; mis abuelos hicieron muchos sacrificios para dejar su patria y nunca volvieron; ellos siempre vivieron agradecidos con esta tierra que les dio todo, pero siempre he tenido la espinita de alguna manera de rendirles tributo”, explica. La pareja vivirá en Barcelona, ciudad de donde son los abuelos maternos de Atala. “Una vez la yaya, mi abuela materna, contó que vivía en Barcelona e iban al cine, comenzaban a sonar las sirenas por bombardeo, iban al refugio y cuando se asomaban veían todo destruído, muertos, pero así seguían al cine, ¡la guerra era parte de su vida!”, narra. Atala no dejará por completo México, pues ya tiene proyecto con un productor, que espera germine, y la casa que aún habita se pondrá sólo a la renta. “Voy a buscar generar contenidos desde Europa que puedan interesar en México, hay muchas series españolas con aceptación del público mexicano; también he pensado seguir colaborando con televisoras desde España y puedo seguir trabajando en empresas mexicanas siempre y cuando venga y grabe programas “Ya tengo un plan con un productor para poder venir cada cierto tiempo, dejar grabados los programa y tener presencia en la pantalla mexicana”, detalla. Su hermano, el también conductor Rafa Sarmiento, se fue hace un mes a Madrid, España, que se encuentra a siete horas de Barcelona en camión y a casi dos en tren o avión. “Hubo una versión que dijo nos íbamos a vivir porque yo había ido a montarle la casa a mi hermano y ahí se me antojó vivir, ¡es completamente falso!”, subraya.