Juan Bustos/ La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. En Michoacán persiste la venta de plazas educativas desde la parte sindical, las cuales pueden rebasar los 200 mil pesos según señalamientos que han existido sobre el tema. La denuncia puntual más reciente se vive en la Escuela Secundaria Federal Numero 1 de Morelia, donde el delegado sindical de la CNTE es acusado de este hecho al realizar acciones fraudulentas para la venta de una plaza de intendencia que terminó incluso en otro municipio, pese a los acuerdos internos que abogan para que los centros de trabajo y su base trabajadora no pierdan el control de las mismas. Sobre este caso en específico, Mexicanos Primero exigió a las autoridades una investigación a fondo. Héctor Salvador Cortés Olvera, intendente de la institución, expuso la denuncia de la irregularidad dada por parte de Víctor Leopoldo Guerrero, secretario general de la delegación, quien aparentemente mercó la plaza de intendencia. El tema no es nuevo, expone por su parte Mexicanos Primero, en voz de su titular en Michoacán, Erik Avilés, quien comenta que un hueco normativo ha permitido que esta práctica persista a pesar de las múltiples reformas; de hecho, señala que esta problemática es relativamente común en planteles de educación básica. Es importante señalar que a pesar de la Reforma Educativa de la pasada administración federal, que estableció el concurso de plazas para que accedan a ellas las personas más capaces, lo hizo únicamente para el servicio docente por lo que plazas administrativas, intendencia y de apoyo educativo continuaron bajo el mismo esquema. En entrevista con esta casa editorial, el trabajador expuso que, de acuerdo con los procedimientos en cada centro de trabajo, por antigüedad y por cumplir todos los requisitos previos, el quejoso tenía el derecho a proponer a una persona en la plaza vacante de intendencia a quien cumpliera con el perfil, como se estilaba en este tipo de cambios. Sin embargo, cuando quiso ejercer esta prerrogativa se encontró con que la plaza ya había sido ocupada sin que se siguiera el protocolo. De Morelia hasta San Agustín del Maíz “Una compañera de intendencia se jubiló y realizó la solicitud ante el Comité Delegacional Sindical que se le apoyara para que la propuesta de ocupar la vacante fuera para su hijo, Juan Alfredo Flores García, tema que ocurrió con normalidad”, relató sobre cómo inició el proceso con la mencionada plaza. Sin embargo, para el mes de octubre del año anterior, Arturo Flores dejó de asistir a su centro de trabajo, sin especificar razones y dejando toda su carga laboral en el resto del personal; el entrevistado señala que incluso dialogó con él, y fue que le comentó que ya no volvería a la Escuela Secundaria, asimismo, que el delegado sindical, Víctor Leopoldo Guerrero, le había solicitado su renuncia, expuso el afectado. Ante la liberación del espacio, “el Comité Delegacional Sindical debió boletinar la disponibilidad de la plaza a concursar, en términos de lo que se hace al presentarse la vacante, pero Víctor Leopoldo no lo hizo; por ello dirigí un oficio para que se realizara el procedimiento de acuerdo con los estatutos”, continuó. El denunciante subrayó que tras estas irregularidades hubo una asamblea donde se realizaron los planteamientos de la posible irregularidad, los cuales la autoridad delegacional negó por completo, pese a la evidente opacidad en la disposición de la plaza y no apegarse a los acuerdos gremiales. “Me di a la tarea de investigar, porque al poco tiempo llego un cheque a la secundaria de una persona que no trabaja ahí, Cintia Guzmán de la Cruz; a partir de ese momento sospechamos de la posibilidad de que la plaza ya había sido asignada”, pese a que anteriormente el Comité había negadomanejos fuera irregulares. Detalló que, en efecto, la clave 1606/S01807/100055 de la plaza de intendencia fue localizada en San Agustín del Maíz, una población de Copándaro de Galeana, “no tengo idea del tiempo que ya lleva asignada, pero si cumple poco más de seis meses parece que no hay posibilidad de solución”. Sobre el tema, señaló que en estos casos es posible que hubiera un acuerdo entre la persona que renunció al puesto y el delegado sindical. “Más tarde busqué a la madre de Juan Alfredo Flores García, le cuestioné por qué aceptó la renuncia de de su hijo y la entrega de la plaza”. Indicó que tiene la idea de que la plaza fue entregada bajo ese mecanismo de acuerdo mutuo, algo que no sería raro, pero el dinero al final no fue entregado a Arturo Flores ni su madre jubilada que le dejó la plaza; “me parece que al final el pago de la plaza no llegó a ellos, por eso estableció una impugnación sobre la asignación de la misma”. Expuso que, tras la visita a diferentes funcionarios, desde José Luis Quintana, director de Secundarias de la Secretaría, y el subsecretario Héctor AyalaMorales, en lugar de apoyarlo lo invitaron a desistir en la denuncia por lo complejo del tema. “El subsecretario me pidió que dejara el tema por lo complicado que se volvería y las vueltas que tendría que dar”. Reiteró que espera que la denuncia llegue finalmente al secretario de Educación (SEE), Alberto Frutis Solís, a quien no ha podido localizar hasta la fecha, “la intención es que él sepa del caso, particularmente porque son irregularidades en las que se da validez desde las autoridades”.