Redacción / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. El Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) no ha funcionado para desalentar el consumo de cigarros o alimentos chatarra, pues al contrario, las tabacaleras casi duplicaron sus ventas en los últimos cinco años y en el estado los cigarrillos son uno de los productos en los que más gastan los michoacanos, al destinar a estos y a la compra de alimentos y bebidas más de la tercera parte de sus ingresos. Pese al fracaso de este gravamen, el gobierno de la República propuso al Congreso de la Unión subir a partir del siguiente año los impuestos a los cigarros, refrescos y otras bebidas que causan problemas de salud, con el objetivo de –ahora sí- disminuir su consumo, mediante una campaña de información sobre los efectos nocivos. También puedes leer: Michoacanos ganan 42 mil al trimestre; los gastan en alimentos, bebidas y tabaco De aprobarse el alza al IEPS, los michoacanos desembolsarían más por la compra de cigarros, pues de acuerdo con el Consejo Estatal de Población (Coespo), los habitantes del estado destinan 36 por ciento en alimentación, bebidas y tabaco, mientras que 19 por ciento lo gastan en transporte y 11 por ciento en servicios de educación y esparcimiento; además, 8 por ciento de su dinero va a cuidados personales, accesorios y efectos personales y otros gastos diversos y solo 7 por ciento se destina vivienda y servicios de conservación, energía eléctrica y combustibles. Impuesto, jugosa recaudación Desde su aparición, los impuestos especiales han probado ser una jugosa fuente de recursos para las arcas públicas. En el primer semestre de 2014, año en que entró en vigor la reforma hacendaria de Enrique Peña Nieto, se recaudaron 37 mil 971 millones de pesos por la aplicación del IEPS a cigarros, refrescos y bebidas energetizantes. Cinco años más tarde, el gobierno de López Obrador captó 53 mil 403 millones de pesos en la primera mitad de 2019, un aumento de 41% por los mismos productos, de acuerdo con datos de Hacienda. No obstante, estos impuestos incumplieron el supuesto objetivo por el que los crearon: reducir el consumo de estos artículos por sus efectos adversos sobre la salud. También puedes leer: López Obrador propone actualizar impuestos a refrescos y cigarros Las tabacaleras casi duplicaron sus ventas durante este tiempo, cuyo volumen pasó de 997 millones de cajetillas de cigarros en el primer semestre de 2014, a mil 733 millones en el periodo igual de 2019, según los resultados de la Encuesta Mensual de la Industria Manufacturera del Inegi. El consumo de cervezas se incrementó de 4 mil 608 millones de litros a 6 mil 95 millones, el de refrescos y jugos se elevó de 9 mil 651 millones de litros a 10 mil 172 millones, y el de bebidas energetizantes aumentó de 190 millones de litros a 238 millones en igual lapso. Gravamen, estéril El director general de la consultoría Inteligencia Pública, Marco Cancino, coincidió en que elevar la carga fiscal a cigarros, refrescos, cervezas y bebidas energetizantes ha demostrado en la práctica que no sirve para desalentar su consumo ni sus ventas. Cuando se creó el IEPS a estos productos, el principal argumento era reducir su consumo y eso no ha sucedido, aunque parece que estos impuestos son una buena fórmula para obtener recursos adicionales y financiar el gasto público", explicó. Para Cancino, usar la justificación de salud pública puede ser políticamente correcto, aunque si la estrategia del gobierno fuera realmente desincentivar el consumo de estos productos, los recursos deberían ser etiquetados para destinarlos a un fondo específico, cuyo objetivo sea prevenir y atender enfermedades ocasionadas por los mismos, pero no es el caso. "Con estas medidas, pareciera que el gobierno está incentivando a la economía informal, porque está aumentando impuestos el sector formal y si la gente percibe que le costarán mucho más los productos, puede preferir el mercado informal, donde no tiene que pagar impuestos", consideró. También puedes leer: Precio de los cigarros sube 8.1%, la tasa más alta en seis años Además concordó en que, ante el aumento de precios, los fumadores pueden preferir comprar tabaco en el mercado ilegal, mismo que puede estar vinculado con la delincuencia organizada. La Confederación de Cámaras Industriales (Concamin) calcula que 17% de los cigarros que se comercializan en el país son ilegales, cuya venta representa una evasión fiscal de 6 mil millones de pesos. Hoy es una buena oportunidad para pensar en una reforma hacendaria de fondo, que extienda la base gravable trasladando informales al sector formal, porque la carga tributaria está siendo bastante fuerte para los contribuyentes cautivos y las pequeñas y medianas empresas; además, la Federación debe asignar a estados y municipios más responsabilidad para recaudar", opinó el director de Inteligencia Pública. ¿Cuál es la nueva estrategia? El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, reconoció hoy que es necesaria una campaña de información con el objeto de advertir sobre los daños a salud y a los bolsillos de los ciudadanos. "No es solo pagar más impuestos, sino que haya más información a la gente", aseguró durante su conferencia de prensa mañanera en Palacio Nacional. El mandatario recordó que su gobierno ya tiene una compaña para evitar que los jóvenes se enganchen con alguna droga, pero la otra campaña que se necesita es la de una alimentación sana. Esa se está preparando, de cómo comer bien, de manera sana y no dejarse llevar por la publicidad y consumir alimentos chatarra afectan la salud y no solo la salud, afectan el bolsillo porque cuesta mucho consumirlos, además de que pueden ser dañinos y sin duda son muy caros". Refirió que la población debe optar por bebidas o alimentos de los pueblos originarios como el pinole de los Tarahumaras, el pozol que toman los chontales o el chilate que se toma en la Costa Chica de Guerrero. "Y así todas las bebidas incluso mucho más baratas, México es de los países con mayor variedad de frutas tropicales o de temporada. Una jarra de (agua) de piña miel ¡imagínense!", dijo. Con información de El Universal