AP/ La Voz de Michoacán Ohio. Las autoridades de inmigración de Estados Unidos dieron marcha atrás luego de meses de amenazas con imponer multas cuantiosas a migrantes que se refugien dentro de iglesias. Una coalición de abogados, organizadores y aliados llamada National Sanctuary Collective, indicó que siete mujeres recibieron notificación de que el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE por sus iniciales en inglés), usando su criterio, retirará su intención de imponerles multas de entre 300,000 y 500,000 dólares. La coalición consideró una victoria la decisión. Sabíamos que estas multas exorbitantes eran ilegales y no eran más que un instrumento para asustar a nuestros clientes y una represalia contra ellos por defenderse y enfrentar a este gobierno”, dijo en un comunicado la abogada Lisbeth Mateo, que representa a una mujer mexicana que vive en una iglesia de Ohio. Las autoridades de inmigración deberían ejercer la misma facultad discrecional “para dejar en libertad a las familias que buscaron estos refugio”. Las migrantes han permanecido en Estados Unidos en violación a la leyes y aún son objeto de órdenes de deportación que el ICE pretende cumplir “por todos los medios disponibles”, indicó el portavoz de la dependencia, Richard Rocha en un correo electrónico. Señaló que el ICE podría hacer una nueva evaluación de las multas. Algunos inmigrantes han buscado evitar la deportación refugiándose en templos, debido a que las autoridades migratorias los consideran “ubicaciones delicadas” en las que se debe evitar la aplicación de leyes migratorias. María Chavalan-Sut, una indígena guatemalteca que buscaba asilo, se refugió en una iglesia metodista unida en Charlottesville, Virginia. Otra mujer lleva más de dos años refugiada con su hijo de 11 años en una iglesia de Austin, Texas. Edith Espinal, clienta de Mateo, ha permanecido los últimos dos años en una iglesia de Columbus. En junio se le notificó a Espinal que enfrentaba una multa de casi 500,000 dólares. En un comunicado, ella dijo que el cambio de decisión del ICE sobre las multas es “un ejemplo de lo que expresarse y organizarse pueden lograr”. La agencia dijo que emitió nueve notificaciones en junio sobre su intención de imponer las multas. El miércoles señaló que ocho de los avisos fueron cancelados y uno continúa vigente. No identificó los casos ni a los inmigrantes afectados. Las cuantiosas sanciones fueron otro recordatorio de que el presidente Donald Trump ha convertido el combate a la inmigración legal e ilegal en la máxima prioridad a nivel interno de su gobierno. A los inmigrantes puestos en libertad bajo fianza, pero que tienen órdenes de salir del país, por lo general se les fija una fecha para que se presenten ante las autoridades de inmigración para su repatriación. Otros tienen orden de presentarse ante autoridades en casos que, en conformidad con políticas del entonces gobierno del presidente Barack Obama, no resultaron en una deportación, a menos de que pesara sobre el afectado una condena por un delito grave en Estados Unidos. Trump canceló esas restricciones casi de inmediato causando que las personas fueran deportadas cuando se presentaran en las oficinas del ICE como se les había ordenado y desalentando a otras de venir a Estados Unidos.