Maricruz Rios / La Voz de Michoacán Morelia, Mich. Tener dos o más tarjetas bancarias pudiera parecer una mala práctica, pero de acuerdo con el despacho financiero Coru, el saber usar estos plásticos con responsabilidad y tener más de uno abre una serie de posibilidades, promociones, ofertas y hasta historial crediticio que de otra forma no se podrían obtener. Y es que es de sobra conocido que las tarjetas de crédito están asociadas con las deudas, por lo que el consejo tradicional no es sólo acotar lo más posible su uso, sino la cantidad de tarjetas que poseas, sin embargo, en algunos casos tener opciones de distintas entidades bancarias puede resultar útil. Lo primero a tomar en cuenta es que la máxima prevalece: en la medida de lo posible, no uses este tipo de plásticos; una vez entendido esto, es de resaltar que diferentes tiendas y negocios, desde departamentales hasta concesionarias de autos, manejan diferentes planes con algunas instituciones bancarias y mediante acuerdos suelen tener mejores acuerdos si eres cliente de algún banco en específico. Además, para hacerse de un patrimonio como un terreno, departamento o casa, es muy probable que recurras a un crédito hipotecario y tendrás que estudiar la mejor opción, pues no necesariamente el banco en el que se encuentre tu cuenta será el que mejores prestaciones te ofrezca, y la mejor forma de agilizar ciertos trámites y abrir puertas es mediante un sano historial crediticio en más de un banco. Tener más de una tarjeta puede, entonces, abrir paso a ofertas especiales. Apenas el pasado Buen Fin los clientes de HSBC, CityBanamex y Banorte tuvieron descuentos adicionales del 10 y hasta el 25 por ciento en la mayoría de cadenas participantes, una promoción a la que no pudieron acceder los usuarios de otras entidades financieras. Actualmente, destaca el despacho, la mayoría de instituciones ofertan tarjetas de crédito sin anualidad, siempre y cuando hagas al menos una transacción mensual con sus herramientas. Solicitar una tarjeta adicional o más requerirá hacer uso de ella, aunque generalmente no hay un mínimo y basta con domiciliar alguno de tus pagos regulares para mantenerla. Agua, teléfono, televisión por cable, telefonía celular, Netflix o algún otro tipo de suscripción mensual puede servir para este fin y la idea central es no usar tus tarjetas a menos que haya una oferta muy atractiva que no puede salir más accesible que con un banco en específico. Es de recordar que al referirnos a ofertas estamos hablando de bienes o servicios que estuviéramos buscando y analizando adquirir con anterioridad, sin lastimar nuestro presupuesto ni sobreendeudarnos, y no una meramente que detectamos el precio de un producto a la baja y por ese simple hecho nos interesa. El tener más de un plástico también puede ser útil para mejorar nuestra historial crediticio y abre posibilidades de préstamos importantes para autos, casa o hasta emprender un negocio. De cualquier forma, hay que atender algunos consejos básicos con esta práctica: dejar todas las tarjetas guardadas, salvo aquella que primariamente podemos usar para el día a día; no ver estos plásticos como extensión de nuestro dinero, sino como herramientas financieras que generan cargos a pagar; tener control absoluto sobre gastos que están domiciliados a cada una, y procurar siempre mantener las finanzas lo más sano posible. Aquí te tenemos algunas sugerencias Si tienes más de una tarjeta, busca aquellas que no paguen anualidad.Domicilia algún pago menos a estos plásticos para mantenerlos activo.No te olvides de pagar todos y cada uno de los pagos domiciliados.Mientras no uses los plásticos, guárdalos en tu casa y no salgas con ellos.Sólo usa alguna otra tarjeta cuando encuentras una promoción que vale la pena.Usa tu historial crediticio para pedir y comparar créditos para auto e inmobiliarios.Mantén siempre tus finanzas sanas, o el tener más tarjetas sólo te ahogará.