El Universal/La Voz de Michoacán.México. El síndrome de Cotard es una enfermedad mental poco frecuente. Su causa está relacionada con problemas psicológicos graves, como demencia, esquizofrenia y psicosis. La Universidad Francisco Marroquín, de Guatemala, señala que el síndrome de Cotard, también conocido como delirio de negación o nihilista, se caracteriza por el rechazo de diversas partes del cuerpo y de seres superiores; así como por la convicción de que se está muerto. “Los pacientes llegan a creer que sus órganos internos se encuentran paralizados o disfuncionales (por ejemplo, su corazón no late), e incluso que se están pudriendo”, señala en un escrito la universidad. Las personas con esta condición son incapaces de iniciar y mantener una relación social con alguien más. Además, en ocasiones, pueden presentar alucinaciones olfativas —detección de olores que no están presentes en el ambiente. El síndrome de Cotard puede presentarse en personas con depresión grave o con enfermedades mentales severas, como demencia con síntomas psicóticos, esquizofrenia, psicosis por complicaciones médicas o postraumáticas. Hasta este momento no existe un tratamiento específico para el síndrome de Cotard, pues lo ideal es tratar la enfermedad que da origen al padecimiento. Posteriormente, someterlos a terapias interpersonales y psicoterapia cognitivo conductual. “Uno de los problemas más graves que ocurren en este fenómeno es el estado de aislamiento grave que hace que la persona esté completamente distanciado del fenómeno vital de la relación humano”, dijo Jesús Ramírez, especialista de Neurología y Neurocirugía de México, en entrevista a la BBC Mundo. El síndrome de Cotard recibió su nombre del neurólogo francés Jules Cotard. Él fue el primero en describirlo como un delirio de negación en París en 1880, cuando documentó el caso de una mujer, a quien apodó Mademoiselle X. En ese entonces la paciente de Jules Cotard negó la existencia de seres superiores y de diversas partes de su cuerpo, al grado de creer que estaba eternamente condenada y que no podría alcanzar una muerte natural.