Notimex / La Voz de Michoacán Ciudad de México. En comisiones del Senado avanza la reforma de Cannabis, que despenaliza la marihuana en toda la cadena de producción y usos, y deroga la disposición que castiga con privación de la libertad la portación de más de cinco gramos de yerba. Una banda de 28 gramos y hasta 200 gramos del estupefaciente, que no esté autorizado, será sancionado con el decomiso y disposiciones que van de la amonestación, trabajo comunitario, multa de 60 a 120 Unidades de Medida y Actualización (UMA), y al arresto por 36 horas que determine la autoridad competente. La portación de más de 200 gramos de yerba no registrada ante las autoridades, de origen al margen de los controles legales, se castiga con las sanciones penales que señala la Ley General de Salud y el Código Penal Federal. La reforma de Cannabis quedó pendiente el año pasado y se prevé que figure en las agendas legislativas de las bancadas para los trabajos de febrero a abril, próximos en el Senado de la República, primero. El anteproyecto, que se ha elaborado por parte de las Comisiones Unidas de Justicia, Salud y Estudios Legislativos Segunda, con opinión de la de Seguridad Pública, presenta una Ley para la Regulación del Cannabis, y reformas a las leyes General de Salud y del Código Penal Federal. Como se ha señalado, en el consumo personal, se autorizarían lugares de reunión, sin acceso a menores de edad. Se prohíbe fumar marihuana en lugares públicos, en presencia de menores y contra la voluntad de adultos. Los artículos transitorios de la reforma tienen plazos de un año para el establecimiento del Instituto Mexicano del Cannabis, que será la autoridad reguladora de las cadenas de producción y el mercado nuevo. Un año después, eventualmente en 2022, el Instituto deberá presentar un Plan Nacional de Seguimiento y Mejora de la Implementación de la Regulación del Cannabis. Desde la obtención de la semilla hasta la distribución, industrialización, incluso, exportación del cannabis y sus derivados, deberán estar registrados ante la autoridad para gozar de los beneficios de la regulación. Se regulan el uso personal, lúdico, comercial, farmacéutico, médico, cosmetológico y de investigación.