Jorge Manzo / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. Hasta 3 mil expedientes, de 5 mil que ha iniciado la Auditoría Superior de Michoacán (ASM) y que están rezagados, se quedaron archivados y ya prescribieron, por lo que ahora se abrirán las investigaciones a fin de conocer si existió o no negligencia por parte de los empleados del órgano técnico de fiscalización, y se irá hasta las últimas consecuencias, sentenció el titular Miguel Ángel Aguirre Avellaneda, quien también garantizó que no se solaparán actos de corrupción, y acalló voces de que es un auditor carnal; recalcó que le dieron el voto 35 diputados de 40. Oficializó que habrá cambios sustanciales en la institución y que no se ha vencido el tiempo jurídico para actuar en la revisión de la presa Francisco J. Múgica, por lo que evitó abundar en más detalles; en donde sí es en el Teatro Mariano Matamoros. Aseguró que el primer paso que se ha dado en contra de posibles actos de corrupción es la denuncia que ya fue presentada ante la Fiscalía General del Estado (FGE) por la pérdida de dos expedientes -de los expresidentes municipales de Uruapan y Zitácuaro-, y lo peor es que no se descarta que haya más documentación oficial extraviada, que no sólo significa eso, sino todos los registros de las actuaciones hechas. Negó que llegue con la espada desenvainada, pero destacó que se cumplirá y hará cumplir la ley. El también exdelegado Administrativo de Finanzas habló Cara a Cara con La Voz de Michoacán y prometió que en un año y medio se podrá ordenar y afianzar la transparencia en el órgano técnico, por lo que comenzarán con la publicación de la plantilla de trabajadores, en donde se diga su salario y cargo. El auditor se dijo sorprendido de que no esté publicada en el portal de Internet esa información. Anunció que tendrán que sistematizar toda la documentación, lo que ayudará a que sea más ágil la búsqueda de datos, y no se tenga que perder tanto tiempo en esta tarea. El contador público también adelantó que se signarán convenios de colaboración con la Universidad Michoacana y el Tecnológico de Morelia a fin de que, a través de sus laboratorios, se pueda revisar la calidad del material con el que se construye la obra pública en el estado, y sean más reales los fallos que emitan los auditores. Reconoció que a su llegada, hace un mes, encontró un verdadero desorden, pero ofreció ir corrigiendo las deficiencias del órgano técnico, mismo que a partir de este año ya cuenta con autonomía financiera. Aguirre Avellaneda afirmó que si en sus fiscalizaciones encuentran elementos para considerar que haya quebranto financiero, se procederá penalmente y paralelamente se llevará a cabo la parte administrativa. Confesó que su escritorio está limpio, porque no quiere que se acumulen tareas y además porque no tiene compromisos más que con la sociedad. Garantizó que será transparente y que les ha pedido a todos sus funcionarios que lo sean, puesto que dando este tipo de mensajes la sociedad recobrará la confianza y se irá cambiando poco a poco la imagen estigmatizada que se tiene de la Auditoría Superior. Si bien rindió protesta en diciembre del año pasado, apenas va tomando posesión de la oficina, puesto que se atravesaron las vacaciones, pero ya en ese corto tiempo se ha dado a la tarea de revisar los expedientes que se tienen en la institución. La documentación que ya está prescrita data del 2008 al 2011 e incluso hacia periodos anteriores. “Estos expedientes están compuestos desde el municipal como del estatal. Vamos a ponernos de acuerdo para prescribirlos e ir abatiendo el rezago respectivamente”, anunció el auditor durante la primera charla que ofrece a La Voz de Michoacán. ¿Qué es lo más significativo que encuentra en esta revisión, casos emblemáticos? “Uno de los primeros casos de los que he hablado se refiere al teatro Mariano Matamoros. Se trata de uno de los expedientes que ya se encuentra prescrito, eso puede ser de los asuntos que más les interesaba a los medios de comunicación y a la sociedad. Ahorita puedo mencionar a alguno de esos y posteriormente vamos a subir en acceso a la información todos los que se encuentran prescritos. Será pública la información que ahí se suba”. ¿Hay más casos emblemáticos en estos expedientes, cuáles otros podría decirnos? “Ahorita tengo el del teatro Mariano Matamoros, nada más, pero puede que sí haya más. Haremos una investigación para ver dónde se encuentra la negligencia para nosotros poner la denuncia ante la Fiscalía Especial Anticorrupción y darle conocimiento a la Contraloría, asimismo a la nueva unidad de control que depende del Congreso”. El auditor explicó que cuando se refiere a una prescripción, significa que se ha agotado el término jurídico para poder actuar. “De 2017, yo encuentro caducados, esto quiere decir, puedo reponer la acción, pero ya no sancionar; también se va a meter a una cuestión de investigación de los servidores públicos que estuvieron involucrados, pero también interviniendo la Fiscalía Especial Anticorrupción”. Pero en los casos que hay tiempos, ahora sí hará algo para esclarecerlos, en otras palabras, ahora sí no habrá tregua “No, no habrá ninguna tregua y vamos a ver quiénes fueron los responsables de la misma Auditoría, porque se prescribieron en la Auditoria Superior. Veo focos rojos en situaciones de primer lugar de que falta un sistema. La Auditoría Superior de Michoacán no cuenta con ningún sistema para poderle dar seguimiento a los expedientes, entonces ahorita estamos en la instalación de ese sistema, porque si ahorita yo pregunto por un expediente no me dan razón de quién lo tiene o en qué procedimiento se encuentra. Tengo el caso de dos expedientes que ya se extraviaron. Puede que existan muchos más perdidos, pero estamos precisamente viendo ese tema ahorita en la entrega-recepción”. ¿Llegas con la espada desenvainada después de todo lo que ya viste, y de lo que se ha informado en medios? “Llego con una legalidad. Yo de lo primero que me estoy quejando es que somos el organismo de fiscalización superior de Michoacán y con todo dolor te lo digo, que soy el organismo menos transparente. Primeramente, no tengo una plantilla de personal publicada, 360 a 369 trabajadores. Eso ya se corregirá en las próximas semanas y se subirá toda la información que deba ser pública y disponible para la sociedad”. “Estamos haciendo el análisis todavía, porque hay muchos que no se encuentran titulados, hay muchos que tienen otra carrera y que están en áreas que no corresponden y hay mucho que no tienen el perfil, que tienen otra carrera, pero no de hacer una auditoría”, evidenció Miguel Ángel Aguirre. ¿En qué más no ves transparencia adentro de la Auditoría? “En qué lugar se encuentran los expedientes, cómo se encuentran los expedientes, cómo va el proceso del expediente. El caso de los caducados de 2017, ahí sí que hay una negligencia grande que vamos a tener que poner la denuncia, te permite hacer eso, que el auditor puede esconder en su escritorio el expediente y dejar que se caduque. “Yo por ejemplo no estoy escondiendo nada, más bien retiré mucho de lo que tenía ahí precisamente para… lo primer que me encontré son los dos expedientes que hacían falta, que ya se puso la denuncia al respecto. Estoy verificando y haciendo una lista de personal. La Auditoria no tenía un presupuesto, hasta ahorita que el Congreso hizo favor de darme una asignación presupuestal. Tenemos una autonomía financiera, y vamos a empezar con el trabajo de hacer presupuestos; me encuentro con que la Auditoría no contaba con presupuesto, es decir, que tampoco había una elaboración de un presupuesto, y ahorita lo estamos haciendo”. ¿Vas a actuar contra el auditor anterior y el encargado del despacho; fueron responsables? “No es tanto que yo actúe contra un exauditor o un exencargado, simplemente si la Fiscalía me dice que ellos son los culpables, adelante, ya tendrá que determinar la Fiscalía o los órganos de control lo que se deberá proceder al respecto. Lo que sí es que no habrá tregua y, si nosotros no tenemos transparencia, yo me puedo hacer de la vista gorda, si yo tengo la transparencia y estoy dando los resultados en tiempo real, no me puedo hacer de la vista gorda”. ¿Eres auditor carnal? “Yo no soy auditor carnal, tanto así que 35 votos a favor, cinco votos en contra, tengo la solidez para decir que no soy auditor carnal; hay que recordar que yo era delegado administrativo de la Secretaría de Finanzas ¿qué quiere decir esto? Que yo nada más controlaba el presupuesto de la Secretaría de Finanzas y de ninguna otra área. Yo no controlaba recursos en la Secretaría de Finanzas, todo se hace a través de las direcciones, entonces no hay una relación con todas las unidades programáticas presupuestales. Sin embargo, yo siempre he dicho que me voy a abstener, porque eso me lo permite la ley, para que nosotros podamos dar cereza a la sociedad de que se va a revisar sin que yo pueda ceder”. A la par, Aguirre Avellaneda explicó que el 90 por ciento de los recursos que ejerce el gobierno de Michoacán es fiscalizado por la Auditoría Superior de la Federación, por lo que descartó que se pueda encubrir o solapar al gobierno de Silvano Aureoles Conejo, en donde colaboró como delegado Administrativo de la Secretaría de Finanzas. ¿A tu llegada a la Auditoría Superior de Michoacán encontraste desorden? “Claro, y ya lo mencioné y lo hice público que es un verdadero desorden. Mi compromiso está siendo que en un año y medio pueda estar rindiendo frutos, es un periodo tan largo porque vuelvo a decir que no tengo sistemas. Tenemos que sistematizar para que la misma gente pueda tener acceso a la información. Vamos a trabajar en línea, pero ese desarrollo del sistema me va a llevar tiempo. En breve, esperamos concretar un acuerdo para que se nos done el programa”. “¿Cuáles son las acciones inmediatas que estamos tomando para poder controlar lo que yo estoy diciendo? Ejemplo, hablamos con el señor rector de la Universidad Michoacana y estamos a punto de firmar un convenio para poder realizar pruebas de laboratorio a las obras tanto que ejecute el gobierno del estado como los municipios. Desde mi comparecencia dije que necesitaba un método científico para saber cómo se encuentra la obra, si es de buena o mala calidad, pero con un método científico. También este convenio se está extendiendo con el Tecnológico de Morelia para que podamos tener tres laboratorios”. “El capítulo 6 mil, que es obra pública y que es sentir de mucha de la ciudadanía, dicen que ven las obras mal, y nosotros no podíamos decirle sí está mal o no. Igual estamos haciendo el convenio con el rector para que todos aquellos compañeros que no se encuentren titulados, darles un periodo para que se titulen. Estamos viendo hacer un convenio con el Tribunal de Justicia Administrativa para que ellos proporcionen a los abogados de parte y pueda tener un abogado de oficio”. ¿En esos 5 mil expedientes vemos a exgobernadores? “No sé, puede que sí. Si hablamos de una situación jurídica del 2011, probablemente estén involucrados exgobernadores, por supuesto, pero yo no puedo atacarlos jurídicamente; no fue mi periodo y por eso lo voy a hacer público, vamos a publicar cuáles son los expedientes, respetando los nombres, porque eso tampoco lo puedo dar a conocer”. La sociedad siente que alguien pueda desviar 5 millones y lo resuelve con un millón de pesos. “No. Con el actuar de la ley y la reforma que hubo a la ley, hay dos partes importantes, la denuncia penal y la parte administrativa. Si hay un quebranto al patrimonio, inmediatamente se pondrá la denuncia penal y yo paralelamente llevará la parte administrativa, yo no necesito terminar la parte administrativa para poner la denuncia penal. “En una obra, ahorita con las pruebas de laboratorio, yo sí te puedo demostrar cuánto es, porque se observaba la totalidad de la obra, se decía que eran cinco millones, pero ese es el costo de toda la obra, no que sea el quebranto. Por eso debemos ser muy cuidadosos en las cifras que estamos dando”. La presa J. Múgica es otro caso. “Ahí me voy a reservar, porque no está prescrito. Como se encuentre en proceso, no puedo dar datos. Por parte de este órgano de fiscalización sigue latente”. ¿Cómo quitar los estigmas que arrastra la Auditoría? “Quiero ser enfático de que si yo no soy transparente puedo hacerme de la vista gorda. Si soy transparente, no puedo. Anteriormente me decía que el auditor que se llamaba por decir “Tachito Mendoza” vino y me auditó, pero viene la pregunta de si estaba dado de alta en mi plantilla, ya cuando la tengamos publicada podremos poner esa denuncia contra fulano de tal. Fue un secreto la nómina de la auditoría y sigue siendo un secreto hasta ahorita. “En todos los cambios se encuentran resistencia”.
La Voz de Michoacán
