AP/La Voz de Michoacán Nueva York. Una mujer que se describió como una aspirante a actriz y admiradora de las películas de Harvey Weinstein dijo el miércoles a los jurados que saltó ante la invitación a hacer una prueba en cámara para actuar. En una reunión subsiguiente en un hotel en Nueva York, Dawn Dunning declaró, Weinstein la guio a una habitación, le metió la mano bajo la falda y le acarició los genitales. “Me paré. Estaba en shock”, dijo Dunning tratando de contener las lágrimas en el juicio de Weinstein por violación mientras recordaba el encuentro de 2004, cuando ella tenía 24 años. "Él empezó a hablar muy rápido. Dijo, ‘No hagas gran cosa de esto. No volverá a ocurrir’”. Cuando la fiscal Meghan Hast le preguntó si ganaba algo rindiendo declaración en el juicio, Dunning repondió: “No, en todo caso estoy perdiendo. Esto es lo peor y lo más difícil que haya hecho”. Dunning, ahora de 40 años, es una de varias mujeres llamadas por la fiscalía como testigos para declarar sobre experiencias con Weinstein que, aunque no son parte de los cargos penales que exproductor de Hollywood enfrenta, podrían ser un factor importante cuando se decida si va a prisión al final del juicio bandera en la era de #MeToo. También dijo que en una reunión posterior Weinstein le mostró un contrato y le dijo que se lo daría si aceptaba tener sexo con él y su asistente. Dijo que durante en incidente, Weinstein mencionó a Salma Hayek y Charlize Theron como insinuando que aceptar sería beneficioso para su carrera. Hayek ha dicho que Weinstein la acosó e intimidó en repetidas ocasiones. Theron se puso furiosa con Weinstein cuando algunas de sus acusadoras alegaron que él insinuó que se había acostado con él. Tarale Wulff, una aspirante a actriz que conoció a Weinstein en 2005 mientras trabajaba sirviendo tragos en uno de los sitios en Manhattan que él solía frecuentar, declararía más tarde el miércoles. Wulff alega que Weinstein la arrinconó una vez en un pasillo y empezó a masturbarse y que en otra ocasión la empujó a una cama y la violó. Los fiscales de Manhattan están trayendo a Dunning, Wulff y una tercera mujer a testificar en su esfuerzo por pintar a Weinstein como un depredador sexual. Los jurados ya oyeron el testimonio de la actriz Annabella Sciorra, que dijo que Weinstein la sometió y la violó tras entrar por la fuerza a su apartamento a mediados de los 90. También escucharon a Mimi Haleyi, una ex asistente de producción de “Project Runway” que declaró entre lágrimas cómo trató de librarse de Weinstein antes de que éste abusara de ella. El martes, la ex compañera de apartamento de Haleyi, Elizabeth Entin, subió al estrado para corroborar su historia. Weinstein, de 67 años, está acusado de darle sexo oral por la fuerza a Mimi Haleyi en 2006 y de violar en 2013 a una aspirante actriz que subiría al estrado esta semana. El productor ha insistido en que todas sus relaciones fueron consensuales, y sus abogados se han enfocado en el contacto continuo que mantuvieron con él sus acusadoras después de sus supuestos abusos. The Associated Press no suele identificar a personas que dicen que han sido víctimas de abuso sexual a menos que éstas lo autoricen, como es el caso de Haleyi y Sciorra. Dunning dijo que conoció a Weinstein mientras servía mesas en un club nocturno en Manhattan. Weinstein inmediatamente pareció interesarse en su incipiente carrera como actriz y la invitó a un almuerzo donde dijo que él pasó “mucho tiempo en el teléfono gritándole a gente”. Dunning dijo que Weinstein también le ofreció hacer una prueba en cámara en su estudio de cine e incluso le consiguió entradas para un show de Broadway para ella y su novio. Hubo varias reuniones más, declaró, incluyendo una en un pequeño hotel en el vecindario de SoHo donde Weinstein estaba usando una suite como oficina temporal. En un momento, declaró Dunning, Weinstein la llevó a una habitación y se sentaron en la cama. “Yo llevaba puesta una falda ese día y él metió su mano bajo mi falda”, dijo. “No hubo señales ni alertas que me hayan hecho anticiparlo”. Dunning dijo que ella le dio “el beneficio de la duda" cuando Weinstein dijo que no volvería a ocurrir. Declaró que no gritó ni le contó a nadie lo sucedido porque estaba avergonzada y no quería ser una víctima. Más tarde, prosiguió, aceptó reunirse con Weinstein en un bar, pero que una asistente la llevó a una suite donde el productor de “Pulp Fiction” (“Tiempos violentos”) estaba parado en una bata de baño. Ahí, dijo que Weinstein le mostró un contrato para tres películas que le daría con la condición de que tuvieran “un trío sexual con su asistente”. “Cuando él dijo eso yo me reí, pensé que estaba bromeando”, dijo Dunning. “Él se puso muy bravo; empezó a gritar, ‘Nunca vas a lograrlo en este negocio. Así es como funciona la industria’". "Él era un tipo grande; estaba abalanzándose sobre mí. Yo estaba aterrada”, declaró Dunning. Dunning primero le dijo al New York Times sobre las supuestas propuestas de sexo a cambio de trabajo en octubre de 2017, pero dijo sólo le contó el incidente de la falda a los fiscales a mediados del año pasado.