El Universal /La Voz de Michoacán México. Los abogados del actor mexicano, Pablo Lyle, quien enfrenta en Miami, Florida, un juicio por homicidio involuntario, podría dar un giro de 180 grados después de que sus abogados, encabezados por Bruce H. Lehr, decidieron demandar al estado de Florida en la Corte de Apelaciones del Tercer Distrito. “Lo que se está diciendo en esta demanda es que las autoridades cometieron el error de no reconocer si había una situación de alto riesgo de seguridad personal contra el acusado -Pablo Lyle- y sus acompañantes, porque el hombre que inició todo el problema parecía estar fuera de sí mismo” comenta a EL UNIVERSAL “José”, una persona muy cercana al caso, quien pidió el anonimato para hablar y quien ha visto la documentación de esta nueva demanda. Lyle formó parte de un altercado el 31 de marzo de 2019, en Miami, cuando Juan Ricardo Hernández, cubano de 63 años, durante una luz roja de semáforo, se bajó de su auto y va hacia la camioneta donde viajaba Lyle de copiloto, acompañado de una mujer y 3 menores, además de quien iba manejando. Hernández se aproximó a la puerta del conductor, Lucas Delfino, golpeó el cristal y muy enojado le hizo algunos reclamos sobre su modo de conducir. Delfino abrió la puerta, se bajó sin quitar la velocidad del auto, por lo que éste siguió avanzando, lo que obligó al conductor a devolverse. En ese momento Juan Ricardo Hernández corrió a su auto y Pablo Lyle se bajó, lo enfrentó con un golpe en la cara y se regresó a la camioneta. Hernández cayó al suelo y quedó inconsciente; después de varios días en un hospital de Miami, falleció. La demanda presentada contra el estado de Florida intenta demostrar discrepancias legales que favorecerían al actor mexicano. Entre ellas y la más importante, una duda razonable de que cuando Juan Ricardo Hernández, después de la discusión con Lucas, regresó corriendo a su vehículo, nadie sabía si podría ir por un arma de fuego para usarla contra ellos o bien subirse a su auto para intentar alguna acción peligrosa contra la vida de ellos. Técnicamente Pablo Lyle habría evitado alguna de estas acciones al golpearlo y escapar. De acuerdo con la ley de Florida, “peligro” significa la posibilidad de recibir ser herido o dañado. En una entrevista dada a la cadena de televisión Telemundo en días pasados, el abogado Lehr declaró que “será el juez quien evalúe todas las acciones que sucedieron durante ese momento”, dejando ver que precisamente están buscando la duda razonable para poner a los ocupantes de la camioneta donde viajaba Lyle como posibles víctimas de una acción peligrosa por parte de Hernández. “En Estados Unidos basta una duda razonable para que un acusado tenga una ventana legal que le permitiría ser señalado como no culpable y esto es lo que el equipo de abogados -de Pablo Lyle- está tratando de provocar” señaló “José”; “ahora hay que esperar la decisión de la corte de apelaciones para conocer cual es el camino que seguirá este caso”. En enero pasado, la jueza Marlene Fernández negó al artista salir de Miami por considerar que podría decidir no regresar a escuchar su sentencia. El equipo legal de Lyle había solicitado permiso para que viajara a México para poder ver a familiares. Por lo pronto, la próxima audiencia para saber que futuro le depara el destino al actor, será el 1 de marzo.