AIMX/La Voz de MichoacánPachuca de Soto, Hgo. La madrugada de este martes falleció en su domicilio el pintor, grabador y litógrafo hidalguense, Leocadio Acosta Falcón, por causas naturales a los 88 años de edad. Acosta Falcón nació en Alfajayucan, Hidalgo, en el año de 1932, hace dos años fue reconocido por el gobierno de Hidalgo con la presea Pedro María Anaya por su trayectoria artística. La comunidad artística de la entidad y el gobernador Omar Fayad lamentaron el deceso del artista y enviaron sus condolencias a la familia del pintor. Leo Acosta estudió en la Escuela Nacional de Pintura y Escultura de 1955 a 1960. Es a partir de 1960, cuando inicia sus estudios como maestro grabador en la Escuela Nacional de Artes Plásticas, entre 1969 y1970 perfecciona sus conocimientos sobre litografía en el taller de Henri Deprest, en París, gracias a una beca otorgada por el OPIC. Es fundador del taller profesional de grabado de La Esmeralda en 1965, además, fue docente de litografía en la Universidad de Guanajuato. En 1974 puso en marcha su propio taller de litografía con un tiraje de Francisco Corzas. Participó en diversas muestras colectivas de grabado con los grupos “Nuevos Grabadores”, “Equipo 7” y la Sociedad Mexicana de Grabadores. Entre los certámenes de gráfica más importantes en los que tomó parte figura la Onceava Bienal de Gráfica de Tokio, en 1979; ese año también fue seleccionado por el Consejo Técnico para dirigir el taller de producción gráfica de la Academia de San Carlos. Instaló varios talleres de litografía como el de Julio Prieto, el del OPIC y el de la Universidad Veracruzana. Impartió clases en la División de Estudios de Postgrado de la ENAP. A su sensibilidad como impresor litográfico agregó su propio lenguaje en las distintas modalidades gráficas. Leo Acosta no es sólo fue un litógrafo inspirado, sino un pintor fuerte, lúcido y reflexivo, por ello sus obras son calificadas de inconfundibles. Su ciclo de litografías inicia en el 1967 y suma decenas y decenas de piezas que representan uno de los conjuntos más sólidos y arriesgados de la gráfica mexicana. El principal reto que plantea su pintura no proviene tanto de la complejidad como del carácter inusitado de sus imágenes. La suya es una construcción en la que las referencias al mundo exterior y los significados habituales de las formas desaparecen. En su pintura la obra advierte de manera indiscutible sobre las cualidades artísticas y el sistema de relaciones con el mundo que la pieza encierra. Leo Acosta es uno de los grabadores, pintores y litógrafos más reconocidos de nuestro país. Su prestigio como artista lo ha llevado a presentar muchos de sus trabajos en varios países alrededor del mundo. En la industria gráfica es célebre por ser uno de los pocos impresores que estampó sobre piedra. (Con información de Sistema de Información Cultural México). AIMX/RPV/OPHComentanos