Maricruz Rios / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. Dos años se cumplieron este 1 de julio de la victoria en las urnas del presidente Andrés Manuel López Obrador, quien en su campaña prometió un ‘proyecto de nación’ que contemplaba el diseño de políticas y esquemas de apoyo que potenciaran a las Mipymes. Sin embargo, persiste todavía una deuda muy grande desde la Federación con las micro y las pequeñas empresas, pendiente que se agudiza ante el actual contexto de crisis sanitaria y económica, considera Jesús Melgoza Velázquez, titular de la Secretaría de Desarrollo Económico (Sedeco) del gobierno de Michoacán. El funcionario estatal destacó que, en materia económica sigue siendo un enorme reto el que tienen todos los niveles de gobierno, “y por parte de la Secretaría de Economía, al día de hoy seguimos esperando el conocer programas en los cuales podamos multiplicar recursos de los municipios, de los estados y de la Federación para apoyar a los pequeños negocios”. El titular de la Secretaría de Desarrollo Económico consideró que, además de estos programas multiplicadores, la banca de desarrollo nacional debe agilizar los trámites y reducir las tasas de interés para poder brindar la liquidez necesaria a los pequeños y nuevos emprendedores, así como el facilitar esquemas que permitan la atracción de inversiones y con ello la generación de nuevos empleos, sobre todo en el ramo formal. Una administración de ‘cancelaciones’ Y es que la gestión del presidente López Obrador ha estado envuelta en decisiones que han impactado de frente y de lleno diversas inversiones, así como la generalidad de la cadena productiva y el crecimiento económico en el país. Solamente al llegar al poder declaró la cancelación del proyecto de nuevo aeropuerto en Texcoco, bajo el argumento de ser una obra plagada de corrupción, sin mostrar a la fecha una sola prueba o siquiera presentar una denuncia formal en la instancia correspondiente; el mismo presidente ha matizado su discurso y señalado que no existe evidencia que haya habido malos manejos en la obra, aunque la cancelación se mantiene, apostando por su proyecto alterno, en una base militar. Aunque sin duda, para Michoacán la decisión que más ha impactado fue la de poner fin al proyecto de Zonas Económicas Especiales, que pretendía dotar de una serie de incentivos fiscales a zonas que se consideraban polos de desarrollo, ubicadas casi todas en zonas de relativa marginación y desarrollo económico irregular. Bajo una argumentación, y nuevamente sin ofrecer una sola prueba concluyente, el presidente decidió el 26 de abril del año pasado cancelar las Zonas Económicas; en el caso de Michoacán, de acuerdo con la misma Sedeco ya había cartas intención para invertir de al menos 11 empresas transnacionales, que veían con buenos ojos establecer bases en la zona costera del estado. El 2019 terminó con un decrecimiento cercano al punto porcentual en materia económica, pese a que se prometió en un principio un crecimiento mayor a los 4 puntos porcentuales por año. Pero la crisis se agudizó con la llegada de la pandemia a territorio mexicano, a finales de febrero, que obligó al cierre de cientos de miles de negocios y la pérdida de un millón de plazas formales de trabajo, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). La gran queja ha sido la falta de medidas contracíclicas (como solicitar deuda para invertir en el rescate de Mipymes y fuentes de empleo) y un magro apoyo dentro de sus esquemas, con préstamos que rondaron los 25 mil pesos por unidades económica y que no han cumplido hasta el momento ni la tercera parte de la población objetivo que la Federación se planteó. Generar empleo e inversión, la meta “Ahora más que nunca se necesita de liquidez para apoyar a la micro y pequeña empresa”, recalca precisamente Jesús Melgoza. Vale la pena señalar que ante la falta de préstamos más fuertes o siquiera de incentivos fiscales con motivo de la recesión económica, fue el Gobierno del Estado el que en Michoacán ha realizado medidas para rembolsar el Impuesto Sobre la Nómina, el Impuesto Sobre el Hospedaje y ofrecer financiamientos de hasta 250 mil pesos con tasas bajas y facilidades de pago significativas. Es aquí donde el titular de la Sedeco nota otro pendiente importante de la Federación: “En el tema de créditos la banca de desarrollo (nacional” tiene que agilizar sus trámites y bajar el costo de sus tasas de interés”. En materia de generación de empleo, Jesús Melgoza considera que ésta se realiza por inversión y “México como país, como gobierno federal, debe ser una prioridad absoluta la confianza para la inversión y ésta se genera con un gobierno promotor, facilitador, transparente y apegado al Estado de Derecho”. “Hemos visto, lamentablemente, cancelaciones del gobierno federal a proyectos de gran calado que han mermado la credibilidad de México para ser un país destino de inversión”, atajó. “El reto sigue siendo que se generan mejores empleos, mejor pagados y que se privilegien conocimientos y capacidades por encima de mano de obra”.