Maricruz Rios / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. Sin mayor cambio en lo que va del año se presenta la producción en Michoacán de huevo en plato, que durante el primer semestre de 2020 presentó un ligero retroceso de 1.4 por ciento con relación al mismo periodo de 2019. En el tema de la producción de alimentos básicos, la Secretaría de Desarrollo Rural y Agroalimentario ha garantizado la seguridad de los mismos en la entidad mientras dure la pandemia. No obstante, en el específico tema del huevo, el cartón presentó al inicio de la contingencia sanitaria una escalada en precios que osciló hasta entre 75 y 90 pesos por kilo. Actualmente su precio ha descendido y se puede encontrar en diversas variedades de calidad y tamaño, con precios al público que van de los 22 a los 35 pesos en promedio. En lo que respecta a la producción, el Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP) resalta que durante el mes de junio Michoacán logró su volumen de producción más alta de huevo para plato: mil 590 toneladas, para un acumulado anual de 9 mil 255 toneladas; el año pasado, durante el primer semestre se habían totalizado 9 mil 392 toneladas, es decir una producción ligeramente mayor. Es importante destacar que el huevo, junto con las carnes y granos básicos como maíz, trigo y sorgo no ha tenido mayor variación negativa en su producción pese a las medidas de aislamiento físico y la baja en las cadenas productivas a raíz de la pandemia de coronavirus. Desde el mes de abril pasado la Sedrua logró un acuerdo con autoridades de todos los niveles, así como la iniciativa privada, con el fin de garantizar la seguridad alimentaria en Michoacán. El acuerdo buscaba garantizar la producción, agrícola, pecuaria y pesca; mantener en funcionamiento las cadenas de suministro de alimentos; fortalecer el flujo de mercancías; facilitar los procesos de movilización de productos del campo hacia los diferentes mercados; así como asegurar también la movilidad de productos del campo con la participación de autoridades de Seguridad Pública. De manera recíproca, se buscó con la iniciativa privada, entre ellos productores y oferentes, evitar la especulación y el acaparamiento que, junto con las compras de pánico, amenazaba con elevar el precio de algunos básicos, tal como sucedió al principio de la pandemia. El mantener la producción de huevo en niveles normales y lograr regresar los precios al público a términos asequibles y estables se pueden considerar parte de los triunfos de estos acuerdos, en donde se prevé que los trabajos de colaboración se mantengan todo el año, pues el panorama para México es prácticamente convivir con el nuevo coronavirus el resto del año.