Redacción / La Voz de Michoacán La higuerilla (Ricinus comunis) es una planta que en el campo se suele considerar como maleza, por lo que, sobre todo en tiempo de lluvias, es chaponeada, pero productores de Chucándiro aprendieron a darle un nuevo uso. Durante un taller impartido por el técnico Rodrigo Toledo, un grupo de agricultores del municipio de Chucándiro aprendieron técnicas agroecológicas para el manejo de cultivos, que además significarán ahorros en los costos de producción y no representan un riesgo para los suelos agrícolas y la salud de los consumidores. El taller se enfocó en la elaboración de un extracto acuoso de higuerilla, una planta que es vista como maleza pero que contiene propiedades secantes y medicinales, además de que su aceite es usado para elaborar biocombustible y lubricantes en el área automotriz y aeronáutica, así como para fabricar jabones y cosméticos. Foto, Cortesía. Las hojas y semillas de la higuerilla se utilizan para elaborar extractos para el manejo de insectos, plagas, roedores, moluscos y fitopatógenos, con resultados exitosos, esto se debe a que es una planta con propiedades insecticidas e insectistáticas, por ello su eficacia en el manejo de insectos-plaga. Para la obtención de extractos de higuerilla, los más comunes son el de agua y el de etanol, ya que tienen gran afinidad polar con las moléculas activas que afectan a los insectos, además son de fácil preparación. Una vez que el material está seco, los frutos se rompen manualmente para extraer las semillas, las cuales se muelen hasta obtener una masa grasosa. De machacar las hojas se obtendrá un polvo fino que debe guardarse en frascos de vidrio, en un lugar fresco y protegido de la luz. Foto, Cortesía. Para elaborar el extracto acuoso, el polvo vegetal obtenido del fruto seco se coloca en agua por 24 horas, 30 gramos del polvo vegetal en un litro de agua. Posteriormente se filtra para separar los sólidos (obtención de compuestos hidrosolubles). Para su aplicación, se disuelven 2 litros en el agua necesaria para cubrir una hectárea. Al añadir el Consorcio Microbiano y diatomeas (algas fosilizadas), se obtienen mejores resultados. Sobre este tema, Rubén Medina Niño, titular de la (Sedrua), señaló que una de las mejores políticas públicas del gobierno del estado es incentivar una agricultura amigable con el medioambiente, que además permite recuperar la nutrición y fertilidad de los suelos agrícolas y cada día tiene una mayor aceptación y resultados en la geografía estatal.