Por primera vez vemos la realidad: María Levy al desnudo sin retoques ni trucos

Agencias / La Voz de Michoacán

México. Dice María Levy que las redes sociales “nos acostumbran a ver la mejor versión de las personas. Aspiramos a realidades inexistentes que nos llevan a un ciclo de constante negatividad y castigo hacia nosotros mismos”. Por eso, por primera vez en su vida, la fotógrafa se animó a posar desnuda, pero sin retoques y mostrando, como lo más normal del mundo, las imperfecciones de su cuerpo.

En su más reciente post de Instagram, la hija de Mariana Levy y Ariel López Padilla confesó que llevaba ya un tiempo queriendo hacer una publicación en la que mostrara al mismo tiempo una foto truqueada (o sea, sumiendo la panza y con una pose favorecedora) y una real y explicó el motivo para hacerlo: “Nunca hablo de mí, pero hoy sí y va al chile... llevo un rato queriendo hacer este post.

Me daba pavor, pero cada vez me siento más fuerte y por ello con la gran responsabilidad de compartir un poco de mi proceso”. María Levy confesó que por mucho tiempo se sintió insegura con su cuerpo, pero que ahora, poco a poco se ha ido aceptando tal cual es.

“Estuve años sintiéndome insegura, llena de complejos, constantemente comparándome y luchando en contra mi bienestar físico y emocional; sin importar como me viera, nunca me sentía tranquila y siempre estaba inconforme. “Hoy me siento mejor. Ahí voy, poquito a poco, aprendiendo a honrar quien soy. Aprendiendo a amar mis estrías, mis cicatrices, mi celulitis, mi pancita, mis lonjitas; aprendiendo a amar mi alma, mi ser y lo que trasciende los sentidos. Es un proceso que va más allá de lo físico y es de mucha paciencia, comprensión y apapacho'.

Sobre las fotos, en las que se ve sentada en un rincón de la casa de campo Casa Ayehualco, totalmente desnuda, María Levy asegura que ambas muestran su verdadero ser. “Y quiero poder crear belleza y expresarme, pero también quiero enseñarles la realidad y la verdad completitas… “Este es un recordatorio desde el fondo de mi corazón y con todo el amor del mundo: hay que honrar y abrazar a nuestro yo más honesto, al no posado, no editado, al relajado, al real. Amemos profundamente a nuestro cuerpo, nuestros procesos, nuestro camino y nuestro ser”, finaliza su mensaje.