Redacción / La Voz de Michoacán Uno de los malestares más molestos que se puede tener y que parece que nunca se irá de nuestro cuerpo es el pie de atleta. Y es que aunque de manera regular apliquemos pomadas, aerosoles o talcos eso no garantiza que esa infección desaparecerá, debido a que con el calzado contaminado es un círculo vicioso. Así que si padeces este mal, toma en cuenta que debes terminar con la infección y también eliminarla de tu calzado ya contaminado. Hay dejar en claro que el pie de atleta es una infección causada por un hongo y puede desarrollarse por diversas situaciones: Humedad excesiva por periodos de tiempo largos No secarse bien Sudoración excesiva Usar calcetines que no son de algodón Usar zapatos de plástico por mucho tiempo Es un hongo contagioso y los demás pueden conrtraerlo fácilmente (en regaderas, contacto de pie a pie y zapatos). ¿CÓMO DETECTARLO? Los síntomas para que sepas si tienes pie de atleta son: -Mal olor -Dolor al extender los dedos -Ampollas -Resequedad -Ardor y comezón A REMEDIARLO Es importante tratarlo antes de que se propague el pie de atleta porque es muy común que se convierta en algo crónico y . Afortunadamente existen remedios caseros que son muy efectivos y te ayudrán si tienes pie de atleta. Vinagre Si mezclas una taza y media de vinagre con tres tazas de agua y sumerges los pies durante 15 minutos, eliminarás el pie de atleta pues los componentes del vinagre evitan la propagación del hongo y lo elimina. Repetir dos veces al día por 15 días. El pH del vinagre crea un ambiente hostil para el hongo que termina por eliminarlo por completo. Sal Mezcla seis cucharadas de sal con cuatro tazas de agua, disuelve la sal en el agua y sumerge los pies durante 15 o 20 minutos. Repite, al menos, 15 días. Así eliminarás el hongo. Jugo de cebolla La cebolla cuenta con propiedades antibióticas que ayudan a eliminar el pie de atleta. Prepararlo es muy sencillo: debes procesar la cebolla hasta obtener el jugo, aplica sobre la zona dañada con un algodón (tras haber lavado tus pies), límpialo, seca y protege tus pies de la humedad con talco, hazlo hasta que el pie de atleta desaparezca. MANTENIMIENTO Una vez eliminado el mal, es importante que cuides la higiene de tus pies: después de lavarlos es necesario secar adecuadamente para que no haya humedad, usar talco ayuda bastante si es que tus pies sudan mucho y tienes zapatos contaminados trata de curarlos o dejar de usarlos para no volver a contagiarte. Con una higiene adecuada podemos evitar el pie de atleta.