Etelberto Cruz Loeza Atrajeron mi atención dos informaciones: la sexta carta del senador de la República, Dante Delgado Ranauro, dirigida al presidente de la República y la entrevista hecha por el director del diario Excélsior, al ciudadano consejero presidente del INE, Lorenzo Córdova Vianello. De la misiva, me pareció destacable: Durante el último año te invité a recapacitar sobre lo que significa ser presidente de la República. Sin embargo, no tardaste en demostrar que estabas decidido a transitar por el camino equivocado. Te he advertido sobre los errores, los excesos y las malas decisiones que has tomado de manera reiterada y sobre las terribles consecuencias que harás padecer a millones de mexicanos. Decidiste no escuchar y mantenerte firme en la decisión de llevar a México de vuelta al pasado ominoso, retrógrado, autoritario y antidemocrático. La tragedia de tu administración es que eres perseverante en el error, obstinado en la sinrazón y obcecado sin importar en las consecuencias. Señalé el riesgo de sembrar vientos, no escuchaste y ahora México está padeciendo las tempestades que desataste. México necesita un presidente de la República que se dedique a trabajar y dar resultados. Dices mucho y haces poco. Preferiste ser dirigente de Morena, abandonando la responsabilidad de ser presidente, jefe de gobierno, jefe de Estado. Esa es la razón de que tengas un gobierno mediocre. Después de casi tres años, te has negado a advertir que el país está cada día peor, sigues sin asumir que la responsabilidad de gobernar es tuya, te has esforzado en buscar a quien culpar, a encontrar responsables en el pasado y no soluciones dentro del gobierno. Te asumes como líder de una facción. Usas y abusas de todos los instrumentos que otorga el poder institucional. Utilizas de manera facciosa el poder presidencial para manipular a tus aliados en el Poder Legislativo. Tu renuencia a asumir a cabalidad tus responsabilidades como jefe de Estado está costando vidas. Miles de seres humanos están muriendo a causa de tu irresponsable manejo de la pandemia, miles de mexicanos están siendo asesinados por la violencia que decidiste no enfrentar con determinación porque decidiste mantener una política de seguridad pública y combate a la delincuencia organizada que no funcionó con Felipe Calderón Hinojosa, que no funcionó con Peña Nieto y que no está funcionando contigo. Por eso te responsabilizo del asesinato de nuestro compañero Abel Murrieta, candidato a la presidencia de Cajeme, en Sonora. Eres responsable, no culpable, pero de lo que sí eres culpable es del clima de crispación que impera en la vida nacional. Eres culpable de violentar permanentemente la Constitución que juraste guardar y hacer guardar. Eres culpable de la captura del Poder Judicial y de la penosa sumisión de tus aliados en el Poder Legislativo. Eres culpable de pervertir la justicia. Eres culpable de intervenir indebidamente en los procesos electorales. Tu fracaso será el fracaso del país. Andrés Manuel saca las manos del proceso electoral porque lo que estás haciendo es abuso del poder. Estás interviniendo en un campo que te está vedado. Abstente de seguir violando la Constitución y la legislación que te impide participar en los procesos electorales. Sé que estás desesperado por la caída de Morena en las preferencias electorales y que estás profundamente mortificado por el crecimiento de acelerado de Movimiento Ciudadano. Estás desesperado, aturdido y desquiciado por la falta de resultados. Lo que obligaste a hacer a la Fiscalía General de la República para interferir en la elección de Nuevo León no tiene nombre, rebaja y pone en entredicho la confianza en una institución cuya obligación es velar por la justicia. Violas la ley, al menos por dos razones: porque estamos dentro de un proceso electoral y porque la presunción de inocencia es un mandato constitucional. Convoco a la FGR a que resista tus embates y actúe a la altura de la responsabilidad que tiene por ley, a que sea un instrumento de la justicia y no al servicio del poder en turno. Convoco a mi amigo José Agustín Ortiz Pinchetti a que honre su trayectoria, a que no sucumba ante el afecto hacia un presidente que está extraviado y que abusivamente está vulnerando la autonomía de las fiscalías. Resumo juicios de Lorenzo Córdova: Nunca se había visto una descalificación tan estridente, tan directa y tan delicada como la que hoy se está haciendo desde la máxima tribuna del país. Esto ha envalentonado a algunos actores afines a la postura en el gobierno para que hagan afirmaciones que son absolutamente impensables en un contexto democrático, como que el INE debe morir, o bien, el INE debe ser exterminado. El poco apego a las reglas del juego democrático que linda en la irresponsabilidad, pone en riesgo la validez de las elecciones, que no le corresponde al INE, sino al Tribual Electoral del Poder Judicial de la Federación. Hay un largo conjunto de jurisprudencias y criterios judiciales en materia electoral que establecen la posibilidad de anular una elección por violación a los principios constitucionales y, evidentemente, uno de los principios constitucionales es la imparcialidad de los funcionarios públicos. El presidente de la República sabe que está violando las leyes constitucionales y el encaje legal electoral. Maquiavélica y perversamente lo hace, porque en el encaje constitucional, y electoral, específicamente, no existe pena para castigar su intromisión en el proceso electoral, replicándose el eje de la validación de la elección presidencial de 2006 – el célebre voto de Leonel Castillo. El dilema del TEPJF fue: sabemos que el presidente de la República violó la ley, pero en la legislación electoral no existe pena para castigarlo -. ¿Entonces? Como lo afirma Lorenzo Córdova, existe ese riesgo, pero, es escasamente probable que se anule la elección federal, aunque sí muchas elecciones estatales, distritales – federales y estales -, municipales las resolverá el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.