Arturo Molina / La Voz de Michoacán Michoacán. Suma 2021 un total de 47 quejas promovidas por parte de familiares debido a "malos tratos" en los centros penitenciarios del Estado de Michoacán. Las condiciones de salud, seguimiento enfermedades e incluso problemas de alimentación son la constante en las quejas que han llegado a los organismos defensores de los Derechos Humanos. A pesar de los esfuerzos de la coordinación Estatal de Centros Penitenciarios, las quejas se siguen acumulando respecto a los sistemas de reinserción social de la entidad, con una marcada tendencia a las condiciones de salubridad y las condiciones de los internos. Información de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH) reveló que son casi 50 las querellas iniciadas durante los últimos meses debido a diferentes causales consideradas como violatorias a las garantías individuales. En la mayoría de los casos, son la falta de condiciones de salud y atención médica las que han derivado en denuncias por parte de los familiares de las personas privadas de la Libertad en las 11 presiones del estado. La Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH), ha advertido a través de las inspecciones, que es común que al presentar alguna enfermedad crónico degenerativa o algún padecimiento grave de salud no encuentren la atención médica necesaria para llevar sus padecimientos privados de la libertad. Incluso, en los últimos 12 meses el centro de readaptación social David Franco Rodríguez en el municipio de Charo, ha presentado condiciones de sobrepoblación debido a la llegada de presos federales. Lo anterior ha derivado también en quejas por parte de familiares por el contexto epidemiológico de la actualidad. Foto: La Voz de Michoacán. Las inspecciones realizadas en años pasados revelan que el tema médico es el principal aspecto de preocupación para los organismos de protección a los Derechos Humanos. Desde la falta de condiciones de enfermería, traslado de pacientes, seguimiento médico enfermedades incluso temas de alimentación revelan la deficiencia de los centros penitenciarios. Incluso, a pesar de las recomendaciones emitidas al inicio de la pandemia del COVID-19 respecto a mejorar los espacios atención médica, aislamiento, abasto de medicamentos y personal calificado para la atención, el anterior no habría cambiado a casi un año y medio de iniciada la contingencia. Apenas la semana pasada con los conflictos generados por sobrepoblación en el Cereso David Franco Rodríguez en el municipio de Charo, se interpuso al menos una queja por parte de familiares debido a la fuerza del traslado de más de 170 internos a otras prisiones. En su momento, manifestados desde afuera de la prisión, los familiares denunciaron heridos e internos enfermos que no fueron adecuadamente atendidos en su salud antes de ser llevados a otra prisión. La preocupación respecto a la salubridad de las PPL, no es nueva. La evaluación de las prisiones presentada en abril del 2020, calificó con un 7.14 en promedio en los 11 Centros de Readaptación Social, y en donde se advierte que las condiciones siguen empeorando en prácticamente todos los rubros respecto a los análisis realizados por la Comisión Estatal de los Derechos Humanos en otros años. Entre las medidas implementadas por los centros penitenciarios para contener los contagios de COVID-19 fue el suspender de manera definitiva todas las visitas. Al respecto, la CEDH no se ha pronunciado en todo lo que va de la contingencia sanitaria. Hasta el inicio de la pandemia, la ausencia de sistemas de atención médica y enfermería básica en las prisiones fue de los principales señalamientos de la CEDH a las 11 prisiones del estado, por lo que incluso se iniciaron proceso de revisión a las condiciones de posible hacinamiento en todos los espacios. Durante meses, Michoacán se mantuvo entre los pocos estados de la república que no presentaron brotes de contagio y que aún se mantienen sin víctimas mortales del COVID 19 al interior de sus centros penitenciarios. Al respecto, la Coordinación de Centros Penitenciarios asegura que la única forma de seguir en esta dinámica es mantener la disciplina.